Estas pelotitas, lunares abultados o verrugas tienen un nombre, una descripción y también una solución 😀 Son muy comunes, más de lo que crees, se llaman acrocordones. El nombre científico es fibroma blando o pólipo fibroepitelial.
Se trata de protuberancias que sobresalen de nuestro cuerpo, que con frecuencia se ubican en zonas de la piel en las que esta es más gruesa y de fricción regular. Es decir, el cuello, antebrazo, párpados, axilas o ingles.
Debemos tener en cuenta que no son verrugas, son benignos e inofensivos pero también un poco incómodos o poco atractivos. Existen varios métodos naturales que ayudan a quitarlos, aquí verás varios:
1.- Aceite de orégano
Mezcla cuatro gotas de aceite de orégano y 8 de aceite de coco, aplica la mezcla en el acrocordón con un hisopo. Durante un mes aproximadamente puedes repetir el proceso tres veces al día. Si no ves resultados, consulta a tu dermatólogo.
2.- Vinagre de manzana
Después de lavar muy bien con agua tibia y jabón neutro para desinfectar la zona, aplica un algodón humedecido en vinagre de manzana separando un poco el acrocordón con suavidad. Véndalo y déjalo así toda la noche, al día siguiente repite este procedimiento y eso debe ser suficiente para que caiga. Es importante no intentar arrancarlo.
3.- Aceite de ricino
Mezcla una cucharada de aceite de ricino con media de levadura en polvo hasta formar una sustancia pastosa, luego úntala en el acrocordón y tapa la zona. Déjalo toda la noche, repite el proceso durante dos semanas, y esto debería ser suficiente para que caiga solo.
4.- Jugo de limón
Aplica un algodón empapado en zumo de limón sobre el acrocordón, repite el proceso tres veces al día durante unas dos o tres semanas aproximadamente y debería caerse. El limón es un antiséptico natural y funciona muy bien en estos casos, es importante tomar en cuenta que no se puede exponer la piel a los rayos del sol porque pueden aparecer manchas en las áreas que tengan limón.
5.- Aceite de árbol de té
Una mota de algodón humedecida con aceite de árbol de té es lo que debes aplicar en el área del acrocordón, tres veces al día durante dos o tres semanas. De esa forma se secará mientras que la piel se mantiene hidratada. Es importante considerar que este aceite es fuerte, por lo cual si la zona se ve medianamente irritada debes detener el procedimiento.
Recuerda que estas bolitas que parecen verrugas –pero no lo son– son benignas y no tienes que quitarlas si no quieres. Los consejos naturales que encontrarás aquí son opcionales en caso de que te molesten o simplemente no te guste verlos en tu piel. Esperamos que sean de gran utilidad.
Te invitamos a compartir esta información con tus conocidos.