La gente se hace tatuajes por varias razones. Muchos porque quieren verse bien y estar a la moda. Otros para recordar algo o alguien especial. Pero hay una parte de las personas que se tatúan que lo hacen por una razón opuesta, para tapar algo que quieren olvidar. Y también están quienes le quieren dar otro significado a las cicatrices.
En estos dos últimos grupos se ubican estas 10 personas que decidieron tatuarse y cuentan sus historias para que otros, quizás temerosos, sigan sus pasos.
1- Azulejo que tapa las quebraduras y múltiples cirugías de un brazo
Rachel se cayó practicando su rutina de gimnasia y se destrozó el brazo izquierdo. Después de meses de cirugías su brazo no quedó bien, le dolía y encima se veía muy mal debido a las múltiples cirugías.
“Las cirugías para remover el músculo muerto y el tejido de la cicatriz deformaron mi antebrazo, y las cicatrices se esparcían por mi brazo y mano me hacían sentir antiestética y fea. Este tatuaje, el primero, es un regalo para mí cuando cumplí 18 como una forma de reclamar mi cuerpo después de haber sido dañada y convirtió mis cicatrices en algo hermoso. No quería cubrir mis cicatrices de las cirugías porque era, y son, una parte muy importante de quién soy ahora, pero quería transformarla en algo de lo que estuviera orgullosa” cuenta Rachel.
2 – Peonias floreciendo para tapar el daño causado
Para esta mujer, los tatuajes fueron terapéuticos. Después de años de lastimarse a sí misma culpa e haber sido abusada por su abuelo desde que era una niña, decidió “plantar algo hermoso donde algo horrible solía estar”.
“Por mucho tiempo sentí que mi cuerpo no me pertenecía” relata “Empecé a lastimarme. Me corté las costillas, los pechos, los muslos. Eran todas partes que él amaba mucho, y quería destruirlas. La peor de mis cicatrices estaba en mis costillas”.
“Aún no está terminado (el tatuaje) y necesita colorearse cuando pueda pagarlo, pero por ahora, es un gran consuelo verlo en el espejo. Estoy recuperando mi cuerpo, una flor a la vez”.
3- Una palabra para decir todo: «Fortaleza»
“En lugar de ocultar mi cicatriz, decidí mostrarla más. El pasado julio tuve mi cirugía de reconstrucción por escoliosis” cuenta la dueña de este original tatuaje al lado de la cicatriz.
“Fortaleza” dice junto a la cicatriz. “La S emula mi espina dorsal sacada de una radiografía antes de la cirugía. Requirió mucha fortaleza recuperarme de una cirugía tan dura y quiero un recordatorio constante de eso”.
4- Un fénix para renacer
Las cicatrices del antebrazo se las había causado 14 años atrás, en la adolescencia, cuando los malos hábitos hacen que este tipo de conductas se lleven a cabo.
“Estuve esperando la mitad de mi vida para cubrirlas con un tatuaje, pero creo que recién ahora desarrollé las agallas para hacerlo. ¡Estoy tan feliz!”
5- Una pluma cubre las cicatrices de una relación abusiva
“Me hice este tatuaje para cubrir las cicatrices de un novio abusivo. Me quebró el brazo y tengo una placa de metal. Volví con él muchas veces. La cicatriz es un recordatorio de lo débil que fui y quería algo hermoso en su lugar. Además mi primo, que fue muy cercano a mí se suicidó hace unos meses atrás y quería homenajearlo. Me decía unicornio”.
Whitney Develle Tattooist – Facebook
“Me llamo Daisy y tengo 20 años. La primera vez que me corté tenía 12, y me diagnosticaron depresión y ansiedad” cuenta la dueña de este tatuaje, que tras años de tratamiento y ayuda médica salió adelante, pero las cicatrices del daño que se había autoinflingido le recordaban esas malas épocas.
“Busqué a Whitney (la tatuadora) y charlamos de cubrir mi antebrazo izquierdo que era la extremidad más dañada, no porque estuviera avergonzada o apenada, pero porque estaba lista para continuar con otro capítulo de mi vida”.
7 – Una espina dorsal derecha para celebrar
“Voy a empezar aclarando que mi espina dorsal nunca se ha visto ni se verá como esto. Cuando tenía 15 años me diagnosticaron con una severa escoliosis” comienza el relato la dueña de este tatuaje.
“El tatuaje es de un texto médico y se extiende 17’’ en mi espalda, sobre mi cicatriz, que casi no se puede ver. Es un símbolo de mi recuperación y fuerza”.
8 – Un león colorido para representar la fuerza que hoy siente
“Cuando era niña, me lastimaba por múltiples razones, para mí lo peor era ser una chica grande. Era más de medio metro más alta que cualquiera de mi clase y fácilmente pesaba más que cualquier niña de mi edad. Cuando llegué a la adolescencia me sumergí en una depresión y desquitándome conmigo parecía ser el único alivio” relata la dueña de este imponente león.
Por eso, de adulta y habiendo superado estos problemas, decidió cubrir sus cicatrices. “Un león fue lo primero que pensé cuando quería algo que representara la fuerza”.
“En lugar de ver un recordatorio del dolor en el que estaba, miro este símbolo increíble de lo que soy 🙂”.
9 – Cinta de regalo para tapar la cicatriz tras remover un tumor
Esta cinta de regalo esconde una cicatriz que dejó una cirugía muy peligrosa. “Tenía un tumor en mi hueso en mi rodilla que me quitaron cuando tenía 10 años. Esta es mi cinta de regalo que se ve como si me estuviera atando” cuenta la dueña de este original tatuaje.
10 – Una pluma negra para encontrar la fuerza
“Me hice este para cubrir las cicatrices que me autoinflingí. Era muy fea que sobresalía y sentía que todo el mundo podía verla y juzgarme. Me la hice un miércoles a la noche después de que otro amigo falleció de una sobredosis intencional” cuenta Laura.
El tatuaje se lo hizo para recordar a su amigo, pero además tiene otro en honor a la canción de The Beatles “Blackbird”.
Estos tatuajes son maravillosos y hablan de superación, confianza y supervivencia. ¡Comparte sus bellas historias!