No solo sirve para unos buenos besos, el bálsamo labial es tu aliado en pequeñas emergencias de la vida diaria si recuerdas usarlo a tu favor. ¡Que estos pequeños tips te sean de ayuda!
1. Pequeñas cortaditas
Cuando estás en la oficina o en la escuela y trabajas con papel es muy común hacerse pequeñas cortadas en los dedos con las hojas de papel. No son letales, pero sí muy molestas. Una delgada capa de bálsamo para labios ayudará a proteger la piel lastimada e incluso ayudar a que se cure más rápido, pues muchas marcas contienen viramina E.
2. Brillo de última hora
Si tienes una junta o evento importante dentro de poco y tus zapatos no son lo suficientemente brillantes, el bálsamo para labios puede funcionar como cera de emergencia. Simplemente aplica un poco de humectante labial en un pañuelo de papel y frota tus zapatitos para que tus pies luzcan brillantes y hermosos, como lo merecen.
3. Nariz lastimada
En tiempo de frío no solo los labios sufren de resequedad, también otras partes del cuerpo como la nariz o las orejas. A veces también sucede que al enfermarnos de gripe nos limpiamos tanto la nariz que la piel se irrita y aplicar loción humectante en la piel lastimada puede ser también doloroso. Consiente a tu nariz con una capa humectante de bálsamo labial, que es suave pero efectivo.
4. Talones rojos
A veces, al estrenar zapatos nuevos, el talón resulta un tanto rígido y terminamos con raspones, ampollas o heridas sangrantes. Me ha pasado. Si tienes bálsamo labial a la mano, aplícalo en la zona afectada y te ayudará humectar la piel lastimada, así como reducir la fricción entre tu pie y el zapato.
5. Anillos atascados
La desesperación al sentir uno de tus dedos asfixiándose con un anillo es inquietante, y hay muchos trucos que prometen solucionar el problema. Aplicando una capa generosa de bálsamo labial en el dedo, conseguirás deslizar el anillo fácilmente y proteger tu piel en el proceso.
6. Cejas perfectas
Está de moda tener cejas abundantes y perfectamente delineadas y acomodadas, cosa que no siempre va de la mano. Para fijar suavemente a esos pelitos de las cejas un tanto «rebeldes», puedes usar una ligera capa de bálsamo labial y peinar después con un cepillo pequeño. Actúa justo como la cera para cejas que venden en las tiendas especializadas pero no tienes que gastar un centavo.
¿Qué te parecen estos pequeños truquitos? A mí me me ha salvado la vida aplicar bálsamo labial en la nariz y también en los nudillos, pues en tiempo de frío mi piel se seca tanto que parezco reptiliana.
Comparte estos pequeños pero útiles trucos con tus amigos, seguro les salvan la vida uno de estos días 🙂