La inocencia de un niño es el impulso y la motivación que los alienta a vivir sus días sin límites. Este niño de diez años es ciego y regala una emotiva enseñanza a quienes muchas veces nos sentimos abatidos por nuestros límites mentales.
El director del campamento de verano dirigido por la Fundación de Ciegos de Quebec, grabó el video de la presentación en pijama de Félix, a quien a todos ha impresionado… ¡La música es su medio de expresión!
Félix interpreta la canción “Every Day I Have The Blues”, que se hizo famosa por el legendario B. B. King, y que actualmente su video está causando un revuelo en las redes sociales. Definitivamente es un talento infantil maravilloso que se manifiesta con profundo sentimiento.
Sarah Rouleau, quien dirige el grupo del campamento comenta que Félix ha encontrado en la música la manera de relacionarse con el mundo y expresar sus sentimientos y habilidades, es una manera de exteriorizar todo lo que lleva por dentro.
Todos están muy complacidos con el desenvolvimiento de Félix a través de la música, es un niño que no habla mucho y ha presentado dificultad para relacionarse con los demás. Sin embargo, un día empezó a hacer ritmos de batería y otro día de pronto empezó a cantar… ¡Fue una gran sorpresa!
Cuando Marie-Eve Soucy, la madre de Félix lo escuchó por primera vez tocando The Blues se sorprendió, porque tenía la creencia que eso no le gustaba mucho a los niños. Pero a su hijo no solo le gusta, sino que lo disfruta, lo siente y hace que quien lo escuche se transporte con tan bella melodía.
Su madre contó que desde muy pequeño el daba golpes a las sillas tratando de imitar los sonidos de la batería. Fue después que mostró interés por la guitarra, y lo que ha aprendido ha sido por su propia iniciativa, por su oído.
La experiencia ha sido muy enriquecedora, los avances han sido importantes. Han tenido que aprender inglés ya que las canciones favoritas de Félix están en ese idioma y solo hablaban francés.
Definitivamente que lo más importante de la vida no está a la vista de los ojos del hombre sino a la vista de los ojos del alma.
Comparte con tus familiares y amigos, todo este amor y ejemplo que Félix le regala al mundo le sea devuelto en bendiciones para cada uno de sus días.