¡Inténtalo! Pregunta a quien tengas a tu alrededor cuál es su finalidad en la vida. El 90% de las respuestas probablemente sean: “ser feliz”. Pero la cuestión es, ¿la gente realmente lo consigue? Y si es así, ¿es un simple estado transitorio o es un estado permanente en el que ya no te hace falta nada más que disfrutar de la vida?
Dan Gilbert, uno de los psicólogos sociales más importantes de las últimas décadas, ha traído a juego el conocido debate de la felicidad gracias a la sencillez de sus teorías, su manera de explicarlo y por qué no decirlo también, su exquisita habilidad para expresarlo.
Es conocido por todos que la industria de la felicidad lleva años moviendo millones y millones, o al menos es la idea de fondo que dejan caer las innumerables agencias con sus mensajes publicitarios.
No hay día en que no aparezca en Internet un nuevo método para conseguir la felicidad: guías de autoayuda, métodos milagrosos para bajar de peso, el anhelado viaje de tus sueños, el auto que siempre quisiste tener… Y Dan Gilbert, viene con sus revolucionarias teorías a cambiar este enfoque de la deseada “felicidad”.
Él es diferente, sus investigaciones están recogidas en su libro Tropezar con la felicidad, que lo puedes conseguir AQUÍ. Sus investigaciones son las mismas que se publican en las mejores revistas científicas; sus charlas TED reciben millones de visitas al día. La clave de su éxito es poner el método científico al servicio de la cuestión.
Uno de sus experimentos consistió en una aplicación para teléfono móvil que preguntaba periódicamente a 5.000 personas de 83 países cómo se sentían, qué hacían y si pensaban en otra cosa diferente de la que estaban realizando. Sus resultados, publicados en la revista Science, mostraron que las personas piensan en cosas que no están ocurriendo. Y los datos revelaron que esa “mente errante” les hacía, con frecuencia, infelices.
La industria de la felicidad es una buena idea, pero debe basarse en la ciencia. Es muy fácil dar a la gente recetas para su vida. Solo hay una manera de saberlo: la ciencia
Es así como él quiere desmarcarse de toda la literatura «charlatana» de autoayuda y fundamentar sus teorías con estudios científicos.
Los ejemplos que da en sus charlas desmontan algunos de los mitos clásicos sobre la felicidad, como su correlación con el dinero o el éxito. Algunos de los ejemplos más reveladores que ha contado son los de Ronald Wayne y Pete Best. El primero de ellos fundó, junto a dos colegas llamados Steve Jobs y Steve Wozniak, una empresa que fabricaba ordenadores. La llamaron Apple. Por miedo a que el proyecto fracasara, Wayne vendió sus acciones por 800 dólares. Ahora valdrían aproximadamente 62 millones de dólares, pero Wayne asegura que no se arrepiente.
TED
El segundo caso es el de Pete Best. Fundó una banda en Liverpool que abandonó al poco tiempo. Se hacían llamar The Beatles y asegura que nunca se arrepintió de dejarla, fue feliz con su estilo de vida.
Una manera disruptiva de vincular el sueño más deseado por el ser humano fundamentado en la ciencia. Quizás los descubrimientos de este hombre nos ayuden a deternos a pensar si somos realmente felices y si es momento de rectificar nuestro rumbo para conseguirlo. Aquí puedes conseguir su libro: Tropezar con la felicidad
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