Ella es Tori Jenkins, de Tennessee, Estados Unidos, tiene 20 años y se disponía a disfrutar de un día de piscina con su pareja en su apartamento en Knoxville.
Todo marchaba con normalidad, hasta que recibió una llamada de la administración del lugar para que se dirigiera a la oficina. Allí le dijeron que su traje de baño “era muy revelador y que podría excitar a los adolescentes que se encontraban en la piscina y los alrededores.
En la oficina le pidieron que posara para unas fotografías que sirvieran para mostrar como ejemplo su inadecuado traje de baño.
Así que le pidieron que se saliera de la piscina porque su bañador “no era apropiado” y ella era muy “curvilínea”. ¿Qué te parece?
Tori no tuvo otra opción que seguir la instrucción que recibió, pero se tomó fotografías con su traje de baño para pedir la opinión de más personas acerca de si su atuendo era apropiado o no.
Tyler Newman es su prometido y decidió compartir la historia y las fotos de su pareja en su perfil de Facebook, para abrir el debate tras la humillación que ella recibió.
Ella aseguró que: “Yo sé cómo luzco, me he comprado este traje de baño de una sola pieza, no es una tanga”.
Tori no comprendía por qué el administrador de la piscina del edificio consideró que su atuendo no era apto para un ambiente familiar. El hombre le dijo que ella tenía más curvas que el resto de las mujeres así que debía usar un traje de baño que cubriera la mayor parte de su cuerpo.
Tori y su prometido Tyler pagan una cuota de 300 dólares mensuales, además de casi 1.000 dólares de alquiler mensual para mantener la piscina de su apartamento.
No se imaginó que sería humillada de esa forma, su prometido comentó en Facebook:
“Nunca había sido testigo de acoso sexual ni discriminación, ni cultura de violación hasta hoy. Nunca he visto a mi prometida con tanta vergüenza, hasta el punto que ni podía mirar a la cara a sus mejores amigos.
Nunca la he visto llorar como lo hizo en nuestro apartamento. Nunca la he visto con tantas ganas de aislarse.
Todo debido a que algunos ignorantes piensan que pueden tener autoridad para juzgar el tamaño y la forma de su cuerpo”.
El consultor de arrendamiento que llamó a Tori tenía puesto un traje de baño estilo “tanga”.
Después que Tyler compartió la publicación en Facebook recibió muchos comentarios de apoyo para ellos condenando la humillación y discriminación que sufrió Tori de parte del administrador.
La mayoría de los comentarios son positivos, apoyando a Tori a salir adelante considerando que la verdadera belleza está en su interior y no tiene nada que ver con medidas ni tallas.
“El objetivo de esta publicación es recordar que ningún hombre o mujer tiene derecho de hacer que me sienta incómoda en mi propia piel. No hay derecho, nadie merece ser humillado sea quien sea”, dijo Tori.
También, comentó que “Si te sucede algo que te hace sentir mal lo más recomendable es hablar y denunciar. Y si eres tú la víctima de maltrato lo mejor es mantener la cabeza en alto y solamente enfocarse en la solución.
No permitas que nadie te haga sentir menos de lo que vales”.
¿Qué te parece? No te vayas sin compartir esta nota con tus amigos.