El sueño de todo padre es estar siempre ahí cuando su hijo lo necesite, protegiéndolo y brindándole su amor a medida que crece y se convierte en un ser independiente, capacitado para enfrentarse a la vida y los obstáculos que esta le presente. Sin embargo, en ocasiones las cosas no salen como se planearon y ni siquiera los papás pueden suplir las necesidades de sus hijos.
Esto fue lo que Michael Campos sintió el día que su pequeño, quien había nacido sin el antebrazo derecho, le pidió una mano nueva. Devastado ante la imposibilidad de concederle a su hijo una mano real para que pudiese cumplir su deseo de ser como el resto de los niños, este amoroso papá juró que conseguiría la manera de construirle un brazo, y eso fue exactamente lo que hizo.
La amputación congénita de Carter comenzó a desarrollarse cuando su mamá tenía 12 semanas de embarazo. Fue en ese momento cuando los doctores advirtieron, gracias al ecosonograma, que la extremidad no se estaba desarrollando normalmente.
«Un doctor se nos acercó y nos explicó que, en el mejor de los casos, Carter nacería sin la mano derecha y, en el peor escenario, sin el brazo derecho». Recuerda Michael, de California, Estados Unidos.
Los médicos no tenían ninguna explicación para la condición del pequeño Carter; el brazo simplemente dejó de desarrollarse cuando se encontraba en la panza de su mamá.
«Estábamos destrozados, nos preocupaba qué tanto podría afectarlo esto y nos entristecía pensar en todas las batallas que tendría que enfrentar».
No obstante, pronto Carter mostró de qué estaba hecho y haber nacido sin extremidad no le impidió llevar una vida normal. A su manera, este adorable niño aprendió a adaptarse para superar los obstáculos básicos de todos los días, como, por ejemplo, sostener el biberón cuando era un bebé o abotonarse el pantalón sin ayuda, ya más grande.
«Era muy duro al principio ser testigo de su lucha, mientras aprendía a realizar ciertas tareas, pero una vez que descubría cómo hacerlo, era un momento de absoluta alegría y, sobre todo, de máximo orgullo para él».
Cuando su hijo le pidió de regalo una mano nueva, Michael no sabía cómo podría ayudarlo, pero de igual modo le prometió que lo haría. Fue entonces cuando, en el afán de buscar una solución para el problema de Carter, dio con e-Nable, un grupo de voluntarios que crea diseños gratuitos de prótesis para impresión 3D.
Después de hacer el primer modelo que consistía en un adaptador para que Carter pudiese montar bicicleta, Michael construyó una prótesis tal como su hijo la soñaba: «él quería una mano de Iron Man. Pasé horas imprimiendo las piezas para poder darle el brillo adecuado, logré hacer que brillara en la oscuridad e incluso le agregué un fidget spinner«.
«Él ama su nueva mano y ver esa sonrisa en su rostro es algo que recordaré por el resto de mi vida».
Pero la mano nueva de Carter fue solo el inicio de lo que se convertiría luego en el más hermoso proyecto. Desde que aprendió a imprimir en 3D desde casa, Michael creó junto a Carter una compañía llamada Claws from Carter.
Ahora construyen prótesis, de motivos diferentes como equipos deportivos o súperheroes, para otros niños que, como Carter, carecen de brazos.
Las prótesis de Claws from Carter están diseñadas para que su calidad y belleza sean inversamente proporcional al costo de producción, que no excede los 50 dólares. Estas piezas son completamente gratuitas y ya han sido enviadas a niños en todo el territorio de Estados Unidos e incluso han llegado al Reino Unido.
Todo esto ocurrió gracias a Carter, si no hubiese sido por él, yo sería indiferente a esta condición, a la impresión en 3D y a la ayuda que podría ofrecer a otras familias».
«Creo que lo que le ocurrió a mi hijo fue todo por una razón: Carter nació para iluminarme y poder así aportarle algo al mundo haciendo estas manos».
¡La felicidad de estos niños es absolutamente conmovedora y todo gracias a Michael!
«Todo lo que hago es en nombre de mi hijo. Lo hago por él y espero que cuando crezca él también pueda hacerse cargo».
Si deseas indagar un poco más en este proyecto o colaborar con algún aporte económico para que siga cambiándole la vida a muchos más niños, puedes entrar aquí.
¡Carter no solo tiene mano de súperheroe, también tiene un papá superhéroe! Comparte su historia y que todos se enteren de lo que es capaz de hacer un padre por su hijo.