Patricia Ramírez, la madre de Gabriel Cruz, el niño de 8 años, cuyo cadáver fue encontrado en Almería en el auto de la mujer de su expareja, tras 12 días de incansable búsqueda, ha hecho una petición en nombre del “Pescaíto»:
“Que no se extienda la rabia, que no se hable de esta mujer más y que queden las buenas personas», refiriéndose a la mujer detenida como supuesta autora del crimen, Ana Julia Quezada.
La madre ha hecho sus primeras declaraciones, donde primeramente ha agradecido todas las muestras de cariño y solidaridad que ha recibido personalmente y a través de las redes sociales, pero su deseo es que cesen los mensajes de odio contra la detenida.
Considera que la detenida «no se merece que se le dé cobertura y no se merece que se hable de ella».
«En honor al ‘pescaito’, que nadie hable de esta mujer más, que no aparezca en ningún sitio y que nadie retuitee cosas de rabia porque ese no era mi hijo y esa no soy yo. Que pague lo que tenga que pagar, pero que lo que quede de este caso sea la fe y las buenas acciones que han salido por todos lados y han sacado lo más bonito de la gente. No puede quedar todo en la cara de esta mujer y en palabras de rabia», ha dicho en una entrevista a los medios.
«No quiero que todo termine con la rabia que esta mujer ha sembrado. Me gustaría que terminara en ese mar de gente que se ha movido: todos por Gabriel», ha pedido.
«Aunque no haya habido final feliz; el ‘Pescaíto’ se nos va nadando hacia el cielo», han sido las palabras de la madre en medio del profundo dolor.
Además, aclaró que desde la desaparición de Gabriel, sólo se ha utilizado una página oficial de Facebook para ayudar en su búsqueda: Todos somos Gabriel, así como una cuenta en Twitter @Todossomosgabri, vinculada a la misma causa.
Pero al parecer, en vista del efecto mediático que ha tenido el caso de Gabriel, como suele suceder en estos casos, algunas personas han abusado de la coyuntura para suplantar la identidad de la madre, difundiendo imágenes de duelo y conseguir de ese modo seguidores. Por lo que ha acudido a los medios también para pedir que dejen de hacerlo.
Ramírez ha llamado a reflexionar a esas personas, que sirviéndose del dolor en que está sumergida toda la familia, se han aprovechado de la situación.
«Me están causando dolor, porque yo no quiero ver esas fotos que ponen de pérdida y desde luego, no quiero que hablen por mí», agregó.
«Todas esas personas que están utilizando la muerte de mi hijo para que las sigan, que miren en su corazón, reflexionen y borren esas cuentas porque ni se lo merece mi hijo, ni me lo merezco yo, ni se lo merece su padre, que está destrozado», agregó.
Además, aseguró que ella no ha publicado ningún tipo de material, como fotografías o vídeos para ser compartidos, con tinte de duelo o dolor, “el día en que yo decida hacerlo seré yo misma quien publique mi propia fotografía”.
Más bien ha instado a que se cuelguen mensajes bonitos con el símbolo del “pescaito” y ha agradecido «a todo el mundo que se ha volcado tanto en ayudar físicamente» en la búsqueda «como en la investigación o llenando de mensajes de cariño».
Por otro lado, aseguró que lamentablemente siempre sospechó de que Ana Julia estaba detrás de la desaparición de su hijo:
«Yo temía que fuera así. No se podía decir nada, porque era parte de la investigación», ha asegurado.
La madre declaró también que su exmarido está sufriendo mucho tras saber que su actual pareja es la principal sospechosa.
«Él es una persona maravillosa, que nadie dude de él. Yo voy a estar a su lado porque tenemos que superar esto los dos juntos. Está destrozado, pero es muy difícil hacer la digestión de la pérdida de un hijo sabiendo que lo ha matado la persona a la que quieres», ha explicado sobre el padre del niño.
Mientras tanto, avanzan las investigaciones en la espera de la autopsia de Gabriel, y continúa el interrogatorio de la detenida.
La gran incógnita que la sociedad entera exige es por qué lo hizo. La detenida, de origen dominicano, había acompañado al padre durante la búsqueda del niño y se había mostrado supuestamente conmovida por lo sucedido ante los medios de comunicación. Pero finalmente, su sospechoso proceder fue el que dirigió a la Guardia Civil a dar con el cadáver de pequeño.
Nos solidarizamos con los sentimientos de la madre de Gabriel y aplaudimos su nobleza de corazón.
Repetimos junto a la madre de Gabriel: “Se nos ha ido nadando al cielo el `pescaíto´”. Comparte esta noticia en tus redes.