Las madres harían lo que fuera porque a sus hijos no les sucediera nada malo. Y, aunque los padres harían lo mismo, ciertamente suelen ser menos aprehensivos, más arriesgados y someten a sus hijos a aventuras con cierta dosis de adrenalina, que los pequeños aman y disfrutan. Pero las madres pueden perder el aliento cuando a los padres se les va la mano, y pueden llegar a poner en riesgo la vida de sus hijos.
Es lo que sucedió con Redha Rozlan, un padre que cometió el acto más imprudente lanzándose de un puente con su hija en brazos, practicando el tan conocido deporte: «bungee jumping».
El vídeo fue publicado en la cuenta de Instagram de la empresa a cargo, llamada Rentas Adventures, en Kuala Kuba Bharu, Malasia. Y también lo hizo el padre en su red social.
Muestra el arriesgado salto oscilante del padre mientras sostiene a su hija de 2 años de edad en brazos.
«Cada niña puede no ser la reina de su esposo, pero ella siempre es una princesa para su padre. El primer amor de una hija, el primer superhéroe de un hijo», es el mensaje que publicó Rentas Adventures.
En las imágenes, Redha Rozlan, aparece de pie en el puente y antes de hacer el arriesgado lanzamiento, da palmadas tranquilizadoras a la pequeña, mientras un hombre grita: «Tres … dos … uno».
De repente, sin previo aviso, la pareja es empujada hacia atrás desde el puente, y la niña pequeña, llamada Mecca Mikaela, se agarra instintivamente a los hombros de su padre mientras caen 60 metros hacia el vacío. ¡Es un horror!… Es la distancia y la fuerza suficiente para convertir las piernas de un adulto en gelatina, y mucho más la de una niña pequeña.
La ola de ira e indignación en línea no tardó en llegar, tanto a la publicación de la empresa, como a la suya en su cuenta de Instagram.
El padre de Mikaela argumentó que ella estaba usando un arnés de seguridad, pero claramente se puede observar que la niña saltó sin casco, mientras el padre sí tenía protección.
Rozlan, por su parte, se vio obligado a defenderse frente a los insultos y críticas en la red:
«Tranquilos, muchachos… No lo hagas con tus hijos, si no están listos para esto», escribió.
Explicó que Mikaela no fue forzada a participar en el acto y que lo disfrutó tanto, que en realidad quería volverlo a hacer.
Sin embargo, el abogado Goh Siu Lin, salió en defensa de los derechos de la pequeña y dijo que los padres del niño «carecían del juicio parental adecuado» al permitirle completar tal acto.
«El salto de primavera con cuerda es un deporte extremo y peligroso, y hay una alta probabilidad de que los movimientos en dicha actividad le causen daño físico. Nunca he escuchado que ningún niño de esa edad pueda participar en deportes extremos», agregó.
Medios locales informaron que tanto el padre, como la compañía podrían enfrentar cargos por poner en peligro la vida de la niña.
«Sí, se pueden tomar medidas en virtud de la Ley de menores. Esto claramente viola los requisitos de seguridad, también», agregó Andrew Khoo, abogado de menores.
«La compañía que operaba el resorte de resorte de cuerda también fue negligente al no evitar que el padre o la madre acompañaran al niño», dijo en respuesta al video de 15 segundos que desde entonces se ha vuelto viral.
Lo más angustiante es que no es el único video publicado por la empresa Rentas Adventures. Pareciera que es habitual que algunos padres disfruten de la adrenalina y pongan en riesgo así a sus pequeños. Muchos han defendido que la empresa ha usado todas las normas de seguridad, y que no consideran nada peligroso porque saben lo que hacen. Otros, por el contrario, apoyan la moción de que sean acusados por negligencia.
¿Y tú qué opinas? ¿Consideras que fue un acto imprudente y negligente, que puso en riesgo la vida de la pequeña Mikaela? ¡Coméntanos y comparte esta impactante noticia en tus redes!