Cuando Elsie Drysdale tenía tan sólo dos años sufrió severas quemaduras en un tercio del cuerpo después de que una olla de agua hirviendo le cayera encima y le quemara la cara, el cuello, la espalda y su hombro derecho.
Sin embargo, esta princesa de Escocia ha logrado dejar atrás esta dolorosa experiencia y a sus cinco años se ha convertido en una hermosa modelo de trajes de baños.
Elsie pasó tres semanas en un pabellón general y después estuvo seis semanas en cuidados intensivos.
La pequeña se dejó llevar por su curiosidad y de manera involuntaria agarró la olla que estaba en el fuego.
Gemma, la madre de Elsie comentó que desde que ella empezó a caminar, ha sido una niña muy inquieta y con una gran habilidad para trepar por los diferentes muebles de la casa, siempre ha sido una niña aventurera.
El accidente de Elsie ocurrió en 2015 mientras Gemma, su madre, estaba cocinando y por un instante le dio la espalda a la cocina para mirar la nevera.
La escuché decir: “huevos, qué delicioso». Pensé que estaba emocionada por el almuerzo, pero oí el golpe de la olla y me di cuenta de que había tirado toda la olla con agua hirviendo sobre ella».
De manera inmediata y por instinto, cogió a su hija, le quitó la ropa y la llevó a la ducha lo más rápido que pudo, para tratar de minimizar el daño con el agua fría.
Al llegar al Hospital Ninewells le informaron a la familia que Elsie debía ser trasladada al Royal Hospital para ser tratada.
Para esta madre, los minutos se convirtieron en horas, fueron los noventa y seis kilómetros más largos de su vida. Fue una verdadera pesadilla ver el sufrimiento de su hija y no poder hacer nada.
Fue ingresada directamente a cuidados intensivos y tras la evaluación del cirujano plástico comenzaron a quitarse la piel muerta poder ver las zonas más afectadas».
Elsie permaneció las siguiente seis semanas recluida en los cuidados intensivos y fue sometida a cuatro operaciones para extraer injertos de piel de sus muslos que fueron estirados con una malla para cubrir las áreas afectadas.
Finalmente, Elsie pudo salir del hospital, pero era necesario que su cuerpo permaneciera cubierto, por lo que debió usar durante casi todo el día por un año un traje hasta los tobillos.
Intentamos explicarle que su tratamiento era como una magia. Ella eligió un traje de color púrpura y otro de color rosa, le dijimos que era mágico y la ayudaría a crecer una piel nueva».
Después del accidente de su hija, Gemma se puso en contacto a través de las redes sociales con otros padres de niños que han sido víctimas de quemaduras. Necesitaba demostrarle a Elsie que esa experiencia no tenía que limitar su vida.
Contactó a Sylvia Mac, una mujer estaba promoviendo en Facebook una página llamada Love Disfigure y en enero, Gemma y Elsie viajaron a Londres para realizar su primera sesión de fotos para la campaña Love Disfigure, modelando trajes de baño.
Para Elsie fue toda una maravillosa experiencia, había personas de todas las edades con cicatrices en la piel igual que ella, lo que hizo que se sintiera muy cómoda a tal punto que se olvidó por completo de su piel.
Todas las modelos fueron embajadoras de las personas con desfiguraciones junto con la antigua nadadora olímpica Sharron Davies.
Necesitamos crear conciencia dentro de esta sociedad que no pierde la desagradable costumbre de juzgar a las personas por su apariencia, tal como lo hacen con un libro por su portada sin conocer lo hermoso que puede ser por dentro.
Todas estas modelos son personas con un inmenso corazón que nos trasmiten maravillosas lecciones de vida. ¡No dejes de compartir esta emotiva historia!