La historia de Lyndee Pellettiere-Swapp ha conmocionado a muchas personas, ella fue encontrada inconsciente en su casa por su hijo Steven quien de inmediato llamó a emergencias para que fuera trasladada al hospital.
Lyndee cayó en estado de coma, se mantuvo así durante los siguientes doce días, el pronóstico que los médicos le daban a su familia era devastador, les dijeron que probablemente jamás se despertaría y que era muy probable que la desconectaran del soporte vital.
El esposo de Lyndee se mantuvo siempre a su lado y le decía constantemente: “necesito que pelees, necesito que pelees”, rogándole que luchara para sobrevivir, no recibió respuesta.
Las esperanzas se agotaban, y él y sus hijos tomaron la dura decisión de seguir las recomendaciones de los médicos tratantes y de cumplir el deseo que tenía Lyndee de donar sus órganos.
En medio de mucho dolor, los familiares de Lyndee se prepararon para despedirse de ella, pero sucedió algo totalmente inesperado justo antes de desconectar los aparatos que la mantenían con vida.
Ella pronunció tres palabras que dejaron a su esposo helado: “soy una luchadora”.
Lyndee no estaba preparada para abandonar este mundo, desde ese momento comenzó su milagrosa recuperación que tiene a los médicos y a su familia sorprendidos. Ella aseguró recordar todo lo que aconteció cuando estaba en coma incluso la petición de su esposo que le rogaba que no se rindiera y a su sobrina leyéndole.
También relató que recordaba las discusiones de sus familiares acerca de tomar la decisión de desconectarla o no del soporte vital.
Nadie se imaginó que en ese estado de inconsciencia podría escuchar y comprender lo que ocurría a su alrededor, por suerte recibió todo el amor posible de su esposo y del resto de su familia que jamás dejaron de acompañarla y animarla.
La familia de Lyndee está feliz por tenerla de regreso a la vida, esperan que su experiencia logre inspirar a otras familias para que no se den por vencidos incluso con el peor pronóstico.
“Solo porque no estés consciente no significa que no puedas oír”, dijo Lyndee, también comentó: “Debes hablar con tus seres queridos si estás en esa situación. Ellos te escuchan”.
Un desenlace que nos recuerda que los milagros sí existen, no te vayas sin compartirlo con tus amigos.