Los Duques de Sussex se mudan del palacio real debido a un conflicto que preocupa a la nación

La convivencia familiar no es nada sencilla, adaptarse al estilo y personalidad de cada quien puede ser difícil para cualquiera. Ahora no nos queremos imaginar cómo debe de ser vivir dentro de las decenas de castillos y palacios de la realeza británica. Detrás del lujo y el glamour, hay miles de reglas y restricciones que se deben cumplir al entrar a esta privilegiada familia.

La familia real más famosa es la del Reino Unido, especialmente los nietos de la reina Isabel II, que han aprendido a manejar su imagen debido a toda la atención de los periodistas y del mundo entero. Los hermanos, Guillermo y Enrique, ya crecieron, maduraron y se casaron. El primero en casarse fue Guillermo con Kate Middleton en el 2011, unión que los convirtió en los duques de Cambridge.

Unos años después, en mayo del 2018, Enrique ya estaba listo para caminar hacia el altar con la actriz canadiense, Meghan Markle. Esta boda despertó nuevamente la atención del pueblo inglés. Los periodistas seguían de cerca la relación de las nuevas concuñadas debido que ambas eran plebeyas, pero justo en los preparativos de la boda de Markle, las dos nuevas integrantes de la realeza vivieron un altercado que arruinó su relación como amigas.

Según muchos cronistas de la familia real, hubo una pelea en la prueba de vestidos del cortejo provocada por un comentario que hizo Meghan Markle a la pequeña princesa Charlotte. El comentario de Markle afectó a Middleton, y muchos concluyen que en esos días la duquesa de Cambridge estaba muy sensible porque tan solo un mes atrás había dado a luz a su tercer hijo, el príncipe Louis.

La prensa afirma que a partir de ese momento el distanciamiento ha sido inminente, y aunque tratan de tener una relación amistosa, ambas duquesas no se agradan.

Los rumores del conflicto aumentaron nuevamente cuando los recién nombrados duques de Sussex, Enrique y Meghan, decidieron mudarse del Palacio de Kensington a la casa de Frogmore Cottage, a 38 kilómetros de distancia. Recordemos que desde que los duques de Sussex se casaron residen en el Nottingham Cottage, casa ubicada en el Palacio de Kensington, residencia oficial de Guillermo y Kate.

“El duque y la duquesa de Sussex, que se preparan para la llegada de su primer hijo, quieren mudarse a la casa de Frogmore, en el castillo de Windsor, a comienzos del año que viene”, dice el comunicado compartido por la familia real.

Sin embargo, Kate trata de disminuir los rumores diciendo que espera con ansias la llegada del nuevo bebé, para que George, Charlotte y Louis, convivan y jueguen con su primito que está a pocos de meses de nacer.

“Será un momento realmente especial”, comentó Kate Middelton sobre la dulce espera de Meghan y su cuñado.

La enemistad que provocó el vestido de Givenchy de la pequeña Charlotte, dejó en evidencia que la personalidad de las duquesas es distinta y la convivencia no era la ideal, por esa razón, muchos aseguran que la mudanza se debe al conflicto. Sin embargo, ellas no dejarán de ser familia y tampoco descuidarán su compromiso con el pueblo inglés.

Pinterest / The Times

En todas las familias hay conflictos, y esta familia no es la excepción. ¿Conocías esta anécdota? Coméntanos y comparte esta noticia en tus redes.

Etiquetas:

Te recomendamos