La luna de miel es un momento esperado por toda pareja de recién casados. Su planificación puede llevar tiempo, todo en busca de que esos días resulten un hecho realidad para los novios.
Por esa razón cuando algo no sale como se había planificado puede ser una verdadera tragedia, sobre todo si la vida de alguno de los novios se ve en peligro. Esta fue la amarga experiencia que vivió un hombre de Wisconsin, quien en su luna de miel contrajo una enfermedad parecida a la poliemielitis que lo dejó parcialmente paralizado.
Su nombre es Adam Spoerri, había contraído nupcias con Bridget Williquette en Milwaukee y ambos emprendieron su viaje por carretera para disfrutar de su luna de miel. Pero en durante el camino ambos enfermaron. De momento creyeron que se debía a algún tipo de virus respiratorio. No obstante, mientras que la novia mejoraba Adam parecía empeorar.
«Bridget se recuperó por sí sola, pero Adam no mejoró. Pensamos que se debía a un inmunosupresor que toma para la enfermedad de Crohn, y a las medicinas para su asma grave», señaló un familiar de los recién casados.
Esa misma semana Adam fue llevado a la sala de emergencias porque no podía respirar y parte de su cuerpo se había paralizado. El mismo día de su ingreso pasó de emergencia a la Unidad de Cuidados Intensivos.
Allí descubrieron que el hombre tenía mielitis flácida aguda (AFI) una condición rara y grave que afecta el sistema nervioso. Especialmente, la espina dorsal en la parte de la materia gris, por lo cual los músculos y reflejos del cuerpo se van debilitando.
Durante 66 días Adam estuvo hospitalizado y conectado a un soporte vital. No obstante, después de esta luna de miel de pesadilla Adam se está recuperando.
De forma progresiva, las 19 horas de conexión al ventilador se redujeron a 5 horas diarias, hasta que empezó a respirar totalmente por sus medios. La terapia física también ha sido de mucha ayuda para que Adam pueda ir recuperando su movilidad.
Ahora, el hombre ha vuelto a hablar después de tener que comunicarse a través de la escritura, ya que sus manos no estaban tan afectadas y conservaban un poco de movilidad.
«El otro día estaba sentado y rascándose la pierna», escribió la familia en una actualización de su página de GoFundMe.
A pesar de lo agotador y lento del proceso, el hombre ha mostrado mejoría y su amada esposa ha estado con él en todo momento. Según señalan los doctores, esto ha sido fundamental para incentivar el proceso de recuperación, y que Adam se mantenga motivado en sus terapias. Pero la sanación total de Adam tomará algunos meses, incluso podría demorar años.
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Parece que a esta pareja le cambiaron la luna de miel por una gran prueba de amor y compromiso. Comparte esta historia de amor verdadero con tus amigos y descubre cuántos son capaces de amar como estos esposos.