Lucky es uno de los amorosos perritos de la familia Wallace, que vive feliz en su hogar. Pero su felicidad no proviene tanto de cómo lo cuidan y lo miman, que de hecho es extraordinario.
Pero su felicidad proviene en gran parte de la increíble relación y dependencia que mantiene con su juguete favorito: un oso de peluche.
Durante 6 largos años, la relación con su osito se ha mantenido intacta, y a pesar de haber sobrevivido a varios accidentes, y cambios propios de la edad del osito, el juguete sigue en perfecto estado.
«Ya no le queda nada de relleno y va a todas partes con él. Juega con él todo el tiempo. Lo protege como si fuera su propio bebé», dijo Michaella Wallace, la dueña de Lucky.
Hasta que recientemente una verdadera tragedia casi termina con la vida del osito y por supuesto con la de Lucky.
Al parecer, a Lucky lo sacaron afuera para que haga sus necesidades porque se venía una gran tormenta de invierno. Y lógicamente, se llevó a su inseparable amigo con él.
Pero lamentablemente, en medio de un descuido de Lucky debido a la oscuridad de la noche, su juguete se perdió.
Y el osito tuvo que pasar la noche en la nieve, mientras el corazón de Lucky estaba destrozado… ¡Y él devastado por completo!
Al día siguiente, el padre de Michaella así encontró al mejor amigo de Lucky, su juguete favorito.
Fue entonces cuando escribió a su hija para contarle la triste realidad con la que se encontró a través de un peculiar mensaje de texto:
«Tengo malas noticias. Encontré a uno de los bebés de Lucky afuera. Probablemente falleció», escribió el padre.
Todos en casa sabían lo importante que era para Lucky su amigo, claramente no era un simple oso de peluche.
Entonces el padre hizo su obra del día y no se resignaba a permitir que Lucky se quedara así de devastado como estaba. Así que pensó cómo hacer para que recuperara la alegría salvando a su juguete preferido.
Decidido a rescatarlo, lo introdujo a la casa y le contó a su hija en otro mensaje el desarrollo del rescate:
«He encontrado un poco de pulso. Le estoy aplicando un RCP», dijo el padre. «Jajaja», respondió Michaella. «He salvado su vida», terminó su papá.
El padre de Wallace fue más lejos aún con su preocupación de abuelo, y montó una improvisada sala de urgencias en su casa, con suero y todo.
El gesto resultó adorable para miles de personas en las redes que aplaudieron su creatividad y el cariño que siente por su mascota.
¡Era la única manera de que el osito se recuperara por completo! Y así Lucky podría sentir lo importante que era su amigo para toda la familia.
A Lucky y a su hermana Laci al fin les dejaron visitar a su amigo en la sala de urgencias improvisada.
«Está completamente recuperado y felizmente de regreso con su protector«, dijo Wallace.
Luego explicó que su padre a menudo hace trucos divertidos sólo para que su perrito disfrute, y él se los festeja.
El humor y la alegría siempre está presente en esta amorosa familia, el perrito es plenamente feliz a su lado.
Ojalá que todos los perros del mundo tuvieran la misma suerte y permanecieran en un hogar como esta durante toda su vida.
«Lucky y Laci aman a mi papá y él igualmente a ellos. Nuestros perros significan mucho para toda nuestra familia y todos los que los conocen los adoran», concluyó Michaella.
Aunque algunos los subestimen, los animales tienen sentimientos que merecen ser respetados. Ellos nos ofrecen lo mejor de su corazón, su lealtad, amor y fidelidad.