Conducir es un acto que implica mucha responsabilidad y por eso existe una edad determinada para obtener el permiso que otorga la ley. Se considera que los adolescentes no son capaces de discernir sobre la gran responsabilidad que esto implica y pueden cometer alguna imprudencia al volante.
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Sin embargo, un hombre de Florida ha demostrado que las locuras no son sólo una cuestión de la adolescencia y ha dejado a todos impactados por la imprudencia que ha cometido. Pero, como si esto no fuese suficiente, el sujeto decidió ir a prisión antes que volver con su esposa.
Leonard Olsen, de 70 años, fue detenido a principio de mayo por conducir de manera imprudente.
Si es que realmente puede considerarse que conducía, pues el hombre decidió treparse al techo corredizo del automóvil mientras que este aún se mantenía en marcha.
Mientras el hombre realizaba la insólita hazaña, fue visto por un oficial fuera de servicio en la oficina del alguacil del condado de Hillsborough, que decidió registrarlo en vídeo y reportarlo a la Patrulla de Caminos de la Florida.
El Sr. Olsen conducía a más de 160 kilómetros por hora y desaceleró hasta los 64 kilómetros para subirse a la ventana corrediza del techo del auto.
El hombre decidió negar lo ocurrido en el momento de ser capturado. Sin embargo, después optó por admitirlo y confesó que lo había hecho por desesperación porque no quería regresar a casa.
«El auto se maneja sólo y tiene una computadora gigante. Pensé que sería una buena manera de alabar a Dios por un minuto, y pensé que sería agradable en ese momento y eso fue lo que hice», dijo Olsen.
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El hombre pidió no llamar a su esposa y estuvo dispuesto a ir a la cárcel antes de tener que regresar a su lado. Según señaló el hombre, estaba cansado de los malos tratos que recibía de su mujer.
“Mi esposa me trata como a un sirviente, la amo, pero estoy cansado de esto. Preferiría ir a la cárcel antes que regresar a casa con ella”, explicó el sujeto.
Efectivamente, la súplica de este hombre fue cumplida. El Sr. Olsen fue detenido y acusado por conducir de forma imprudente y otros delitos menores. Parece que el matrimonio se le ha hecho bastante pesado, pues que decidió sacrificar su libertad antes que seguir viviendo con su mujer.
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