En ocasiones, las madres jóvenes se ven abrumadas por todos los problemas que pueden surgir a su alrededor y toman la difícil decisión de dar en adopción al ser que más aman, para que no tengan que pasar malos momentos.
Pero, la vida les devolvió la oportunidad a dos mujeres de Carolina del Norte para reunirse, después de estar separadas durante 70 años.
Todo comenzó cuando Wanda LeBlanc, una fotógrafa profesional, tomó una prueba de ADN en casa. Mientras repasaba la lista de parientes más cercanos que coincidían con su ADN, Wanda vio un nombre que no reconoció en absoluto: Lynne Wray.
Confundida e intrigada, Wanda decidió investigar el perfil de Lynne.
«Fui adoptada y nunca conocí a mi familia biológica», podía leerse en el perfil de Lynne.
Rápidamente LeBlanc descubrió que la mujer era su tía biológica. Wanda se puso en contacto con Lynne por una llamada telefónica, le informó sobre la prueba y el hecho de que los resultados arrojaran su nombre.
Lynne no pudo contener la emoción cuando escuchó todo y rompió en llanto.
“Tú eres el primer miembro de mi familia biológica con quien tengo contacto, es un milagro”, le dijo Lynne a Wanda durante la conversación.
Lynne explicó que había estado tratando de localizar a su madre biológica durante años. Todo lo que sabía era que su madre biológica nació en Carolina del Norte y era parte india.
Wanda decidió hablar con su madre y su abuela, Elizabeth Pullen, sobre el descubrimiento. Ahí fue cuando finalmente surgió la verdad.
Elizabeth confesó que había puesto a una niña en adopción hace 70 años. En aquel entonces, el protocolo de adopción generalmente prohibía a las madres ver a sus bebés después del nacimiento.
Wanda ayudó a que Elizabeth y Lynne se reunieran por primera vez este mes de mayo
La fotógrafa es contratada para hacer sesiones denominadas de «primera mirada» para muchas parejas antes de su boda en su negocio de fotografía, una idea que sabía que también podía aplicar para la ocasión.
El reencuentro se llevó a cabo en Sugar Mill Pond en Youngsville, Louisiana. Wanda capturó el emotivo momento en fotografías y vídeo, mismo que subió a Internet para difundir su historia.
En el vídeo puede verse a las dos mujeres de espaldas una junto a la otra, cuando voltean a verse, se abrazan y no pueden evitar las lágrimas.
“Ella es muy hermosa, yo estaba muy emocionada y nerviosa a la vez, realmente no puedo explicarlo con palabras”, dijo la señora Pullen.
Elizabeth, de 90 años, finalmente se encontró de pie con su hija después de 70 años.
“Nunca la olvidé, yo sabía que algún día la volvería a ver, estoy feliz de que finalmente pasara”, agrego la señora Pullen.
Lynn espera convivir más tiempo con su familia biológica y conocer a todos sus miembros, no le queda más que agradecer a Wanda por tan hermoso gesto.
Comparte esta emotiva historia con todos tus amigos y pierdas la fe de ver realizados cada uno de tus sueños, por más imposibles que parezcan.