La contaminación es un problema que nos aqueja a diario y lentamente va matando nuestro ecosistema y nuestra naturaleza. Mientras a muchos parece no importarles en absoluto, hay otras personas en el mundo que buscan el bien y dejar un aporte positivo.
Tal es el caso de una abuela de 70 años que se tomó el trabajo de limpiar nada más y nada menos que 52 playas de la costa sur del Reino Unido; más precisamente en Cornualles.
El impulso de la abuela provino de un documental sobre contaminación
Se trata de una mujer llamada Pat Smith, quien con su gesto demuestra que con pequeñas acciones todos podemos aportar nuestro granito de arena para salvar el mundo.
Smith se propuso recoger la basura de esta costa como una de las metas a cumplir en el año nuevo 2018 y finalmente ahora lo logró y fue reconocida con el apodo «Action nan».
Su meta del 2018 finalmente se cumplió
En una entrevista reveló que su objetivo es «lograr que su comunidad sea un lugar mejor y más limpio».
Por su parte, Victoria Carpenter, quien conoce a la abuela, habló de sus intenciones: “Quería ser alguien que hizo algo al respecto, pero también para lograr que otras personas lleguen a la misma conclusión”.
La abuela tomó conciencia de lo que ocurría a partir de un documental sobre la contaminación ambiental por plásticos. Desde entonces la mujer recorrió los extensos territorios desde Coverack (Península de Lizard) hasta Blackpool Sands (en Devon).
Pero no estuvo sola en esta hermosa aventura: sus nietos y otros voluntarios se unieron a la idea que ha sido reconocida por activistas y organizaciones.
Gran parte de la familia se unió y no fue ella sola la que hizo este noble trabajo
Durante este tiempo, Smith fue confundida con trabajadores comunitarios por la gente que recorría el lugar, pero ella todo el tiempo insiste en que es una labor voluntaria, que todos de alguna u otra manera deberíamos adoptar.
“Todos debemos asumir la responsabilidad de recoger la basura y asegurarnos, principalmente, de no arrojarla en ningún lugar”, remarcó la abuela.
Y no sólo esto, desde 2017, la abuela se comprometió con la causa y arengó a que más de 500 empresas locales dejen de utilizar plásticos innecesarios o de sólo un uso.
«Siento que tengo una responsabilidad con mis hijos y nietos», concluyó.
Comparte esta historia con tus amistades para motivarlas a cuidar el medio ambiente y tener la responsabilidad de no arrojar la basura. ¡Por un mundo mejor!