“Mamá Julia” es una mujer hermosa que ha visto y vivido lo que muchos de nosotros solo conocemos a través de la historia contada en los libros. Su nombre de cuna es Julia Flores Colque, la mujer más longeva de Bolivia.
Con 118 años de edad “mamá Julia” recibió su primera casa propia entregada a través de una organización del estado boliviano.
Reside en Sacaba, poblado de los valle de Cochabamba, centro del país.
La alegre abuelita obtuvo su vivienda gracias a un programa estatal de asistencia habitacional a personas de escasos recursos económicos. “Mamá Julia” es un símbolo de familia, unión y fuerza para toda la región que tiene años contemplando a una mujer luchadora y guerrera que a pesar de las adversidades siempre tiene una sonrisa en su rostro.
La hermosa abuelita es aficionada a la música, por su avanzada edad ya no puede interpretarla pero eso no impide que pueda disfrutarla a su manera.
También recibió un charango, instrumento andino de cuerdas.
La tierna abuelita vivía en una humilde casa de adobe con un pequeño jardín, tenía algunos animalitos como perros, gatos y gallinas. Algunos de sus familiares vivían con ella para ayudarla con las actividades diarias, ahora podrá disfrutar de una casa mucho más cómoda y segura.
Para esta dulce abuelita pareciera no existir los límites, a pesar de los años y de la constante transformación de la cultura “mamá Julia” se comunica en lengua quechua.
La nueva vivienda mide 51 m2 y tiene un valor de 15.500 dólares.
A lo largo de su vida “mamá Julia” ha sido testigo de dos de los grandes acontecimientos históricos que cambiaron el mundo, las dos guerras mundiales, ha vivido las revoluciones de su país natal y visto la transformación de su pueblo rural de Sacaba, un pequeño poblado de 3.000 personas, a una agitada ciudad de más de 175.000 persona en menos de 50 años.
Su documento de identidad dice que nació el 26 de octubre de 1.900
Seguro estamos que la hermosa abuelita celebrará este año sus 119 años al lado de sus amigos más cercanos y de todas las generaciones que ella ha visto crecer. Con esta edad, sin duda, se convertiría en la abuelita con mayor edad en la región andina, y posiblemente la persona más vieja del mundo.
Un portavoz de Guinnes World Records afirmó que no hay ninguna solicitud y que a Flores no parece importarle el registro.
Quizá no sea necesario un reconocido récord para saber que en el mundo hay una hermosa abuelita que con actitud y mucho carisma ha logrado vivir muchos años, y después de todo por fin disfrutará de una vivienda propia.
Anímate a compartir la nota para que más personas conozcan a “mamá Julia” y juntos podamos hacerla un referente histórico aunque no esté en los registros de un libro.