No hay nada como pasar un par de días conectados con la naturaleza para poder distraernos un poco de la rutina y lograr reencontrarnos con nosotros mismos. Sin embargo, es importante seguir medidas de seguridad para evitar cualquier accidente.
Recientemente, un hombre de 73 años se perdió en medio de una caminata en California.
Eugene vive en la ciudad de San Bernardino al sur de California.
Se trataba de un grupo que estaba explorando el Parque Nacional Ángeles. Entre ellos se encontraba Eugene Jo, un veterano con experiencia militar y un verdadero amor por el excursionismo.
Cuando se encontraron cerca del sendero conocido el Cañón del Diablo se dieron cuenta de que Eugene ya no estaba junto a ellos y por más que intentaron llamarlo y buscarlo por los alrededores no lograron encontrar ningún rastro.
Se perdió todo contacto con Eugene el 22 de junio.
Por seguridad, el resto del grupo se vio obligado a tomar el camino de vuelta e inmediatamente comenzaron las búsquedas para dar con el paradero de Eugene.
Decenas de personas se ofrecieron para participar en este importante rescate mientras el Condado de los Ángeles desplegó sus mejores perros, drones y helicópteros para poder asegurarse de buscar en cada rincón del parque Nacional.
Habían 70 personas en el equipo de búsqueda y rescate.
Los días pasaban y nadie lograba encontrar a Eugene. Pasados los cinco días todos comenzaron a preocuparse ya que sabían que él no contaba con recursos y comida para sobrevivir durante tanto tiempo allí afuera.
Afortunadamente, cuando se cumplió una semana de su desaparición, el equipo de búsqueda y rescate compartió las noticias que tanto habían estado esperando.
“Lo encontramos con vida. Puede caminar y hablar”.
Lo trasladaron de inmediato a un hospital para que pudiera recibir ayuda médica. Fue allí donde explicó a todos que se las había ingeniado para poder mantener el calor durante las noches.
No había comido más que algunas plantas de la zona, pero había encontrado un arroyo gracias al cual pudo mantenerse hidratado.
“Se mantuvo cerca a las rocas que tanto se calientan durante el día. También utilizó su chaqueta y la toalla de playa que llevaba para poder protegerse del frío”.
Debido a lo duro que era el terreno y todo el tiempo que pasó vagando por la zona, sus zapatos quedaron completamente destrozados. En una imagen se puede ver como se despegó por completo la suela y él continuó sosteniéndola a su pie con ayuda de los cordones.
“Sobrevivió gracias a su entrenamiento militar y a su determinación de que jamás se rendiría”.
Tras días de angustia para sus familiares amigos, este incansable hombre logró demostrar que está dispuesto a sobrevivir en medio de una situación tan difícil.
Comparte esta maravillosa noticia para apoyar a Eugene en lo que sin duda es una maravillosa trayectoria como excursionista.