La ciudad argentina de Miramar, al sudeste de la provincia de Buenos Aires, se encuentra conmocionada tras el segundo caso del ataúd de un bebé profanado, en las inmediaciones del cementerio de Miramar.
No habían pasado ni dos semanas de que el cuerpo de un bebé de 4 meses fuera robado del cementerio local, sin que hasta el momento se supiera algo de dónde se encuentra, cuando el cuerpo de un segundo bebé ha sido sustraído también, estremeciendo al país entero.
El cuerpo del pequeño Ciro Lescano, fallecido a los 4 meses de edad, fue robado entre el 5 y 8 de julio, sigue sin aparecer y el misterio continúa en Miramar.
Fue precisamente durante la búsqueda de pistas para dar con el cuerpo de Ciro, cuando se hallaron unas prendas de bebé en las inmediaciones del cementerio.
Pero lo inquietante fue que la madre de Ciro, Noelia Lescano, no las reconoció como que fueran de su hijo, por lo que las difundió en Facebook. Muchos temían lo peor.
Se trataba de unas bermudas vaqueras y una chaqueta de niño blanca.
La imagen se difundió ampliamente en redes sociales, hasta que de casualidad llegó hasta los padres de Liam Rodríguez, un pequeño de 2 años de edad que falleció el pasado 4 de febrero a causa de un terrible accidente doméstico: un televisor se desprendió de su soporte cayendo sobre su cabecita y quitándole la vida al instante.
Los padres de Liam, Camila Rodríguez y Nahuel Cepeda, sin embargo, sí reconocieron las prendas que publicó Noelia, y empezaron a sospechar que el cuerpo de su pequeño correría la misma trágica suerte que la del pequeño Ciro.
Tras las denuncias respectivas, y los peritajes que vienen al caso, finalmente se procedió con la exhumación del cuerpo. Las autoridades de la ciudad costera confirmaron que el cuerpo del pequeño Liam no se encontraba ahí, sin embargo el féretro se encontraba en perfecto estado.
Miramar permanece en una sosobra constante ya que con Liam, ya son 4 los cuerpos de bebés sustraídos de un cementerio.
Un dato que estremece en este triste suceso es que, a diferencia de la sepultura de Ciro Lescano, que mostraba evidencias de tierra removida varios días después de su entierro, la estructura de la lápida que los padres de Liam colocaron sobre su tumba estaba intacta. Por lo que todo apunta a que el cuerpo del menor pudo haber sido sustraído incluso antes de colocar el féretro.
Las investigaciones hasta ahora no han arrojado sospechosos.Y aunque se desconocen los fines por los que los cuerpos habrían sido robados, muchos señalan que podría deberse a rituales satánicos. De hecho, el pasado jueves en medio de un amplio operativo se allanó una vivienda, sindicada como un sitio en el cual se practican diversos rituales.
Resulta verdaderamente perturbador el hecho de que un padre no solo pierda a su pequeño sino que además lo único que le quedaba de él para llorar su partida ya no lo tiene más. ¡Comparte esta noticia!