Un padre de dos hijas ha vuelto a respirar tranquilo, después de encontrar los anillos de matrimonio de él y su difunta esposa. Patrick Waddell, de Winston-Salem en Carolina del Norte, perdió un collar que contenía el par de anillos de bodas, mientras estaba de vacaciones en Myrtle Beach.
El sábado 27 de agosto Patrick estuvo disfrutando del mar en el campamento de Ocean Lakes, cuando perdió por accidente el objeto de joyería.
Como era de esperarse quedó completamente afligido por el extravío, pues los anillos eran símbolo del amor que compartió con su difunta esposa que falleció hace cuatro años, tras una ardua batalla contra el cáncer de colon.
Desesperado por encontrarlo, el hombre decidió publicar una advertencia en Facebook con la esperanza de que alguien pudiese darle al menos una pista sobre sus anillos y, en el mejor de los caso, recuperarlos.
“Hoy perdí mi collar, aparentemente se cayó alrededor de la vía a la carretera principal, en el sitio 3026. Tenía dos anillos de matrimonio, el mío y el de mi difunta esposa, juntos en bucle para que no se pudiesen separar. Ella falleció hace casi 4 años al cáncer de colon. Si alguien los ha encontrado, no puedo decirles lo que significaría para mí poder recuperarlos”, decía parte de la publicación.
Gracias a esta iniciativa, Patrick ha vuelto a respirar tranquilo pues una familia había visto las joyas y decidieron ir por ellas para regresarlas a su dueño.
En primera instancia, uno de los hijos del grupo familiar vio la pieza, pero no fue hasta leer la publicación de Patrick que decidió ir por ella al lugar para que regresaran con el verdadero dueño.
“Mi hijo vio una publicación en las redes sociales de Ocean Lakes Campground sobre los anillos y dijo: ‘¡Mira mamá, esos son los anillos que vimos!'», relató la mujer al momento de entregar la pieza.
El martes 30, un empleado del Graham Golf Cars llamó a Waddell para informarle que habían recuperado su joya. Una familia samaritana la entregó, aunque los anillos habían sido atropellados y tenía una ligera abolladura.
“¡Se han encontrado mis anillos! Ligeramente atropellados, pero aún así están juntos. ¡Dios es genial!”, Escribió Waddell en Facebook.
Aunque Patrick no pudo conocer en persona a la familia que hizo posible el hallazgo, el hombre quedó enteramente agradecido ¿Cómo no?, si para este veterano las piezas guardan un profundo valor sentimental.
“No sé quién eres, pero te lo agradezco desde el fondo de mi corazón. Que Dios bendiga el resto de tu semana aquí en el campamento local», escribió Waddell en otra publicación de Facebook.
Después de todo el evento Patrick aseguró que no arreglará la pequeña abolladura en los anillos, aún si algún joyero se ofreciera a arreglar las piezas.
Él prefiere conservarlas con todo la pequeña curva que tienen ahora, pues “son unos anillos reales. No son perfectos, y cada defecto cuenta una historia, algo similar con lo que ocurre en los propios matrimonios.
Parece que Dios ha querido que Patrick conserve ese pedazo de su esposa ya en el cielo. Comparte esta curiosa nota y demuéstrale a tus amigos que sí es posible encontrar la aguja en el pajar.