Con el sol y la diversión que trae el verano, los toboganes y las piscinas de olas de los parques acuáticos se han convertido en el sitio favorito de niños y adultos para pasar las vacaciones.
Sin embargo, las aguas poco profundas pueden esconder un verdadero peligro para sus visitantes quienes, enfocados solo en la diversión, se olvidan de los cuidados que hay que tener para prevenir accidentes.
Las personas que no son buenas nadadoras, los niños y los golpes inesperados o las caídas pueden llevar a lesiones de cualquier tipo, pero además, y como veremos a continuación, pueden colocarnos al borde de la muerte.
Jade Graves, una turista y madre británica de 29 años y oriunda de Hull, East Yorkshire, Inglaterra, estuvo a punto de morir luego de subirse al Space Jam, un tobogán acuático extremo de 90 grados de inclinación, ubicado a 22 metros de altura, en el parque Aqua Paradise, en Bulgaria.
En el descenso, la joven sufrió una herida cortante en la arteria de una de sus piernas, lo que le produjo una intensa hemorragia sanguínea y tuvo que ser llevada de emergencia a un centro asistencial.
A pesar de haber seguido al pie de la letra todas las recomendaciones del socorrista, la mujer dice haber sentido un intenso dolor repentino en la parte baja de su pelvis, antes de percatarse de la sangre que brotaba de su pierna y golpear finalmente contra el agua de la piscina.
Ahora está considerando interponer acciones legales contra el parque acuático por negligencia.
“Quería pasar unas vacaciones diferentes y encantadoras con mi familia, pero toda la experiencia ha sido traumática. Cuando llegué al agua, sentí mucho dolor y perdí tanta sangre que tuve que recibir una transfusión”, dijo Jade.
El personal de Aqua Park trató desesperadamente de detener la pérdida de sangre, pero fue tanta que Jade apenas podía permanecer consciente o respirar.
Por otro lado, el copioso sangrado arterial ocasionado por el corte abrupto de la arteria, le produjo un shock hemorrágico y anemia secundaria, por lo que la mujer se vio obligada a tomarse un largo respiro del trabajo durante cinco semanas, adicionales a los cuatro días que permaneció en el hospital bajo observación y recuperarse por completo.
No obstante, la vida de la joven turista británica dio un giro de 180 grados, ya que se encuentra completamente afectada, con muchos dolores físicos y un daño psicológico que, por lo visto, tardará mucho en olvidar.
“Fue una pesadilla y todavía me duele. Aún no estoy segura de qué sucedió exactamente, porque seguí todas las indicaciones que me puso el socorrista”, aseguró la joven.
En su sitio web, el parque se describe a sí mismo como un rival de “los parques acuáticos más modernos de Europa y América” y recomienda el tobogán de 22 metros a todos aquellos fanáticos de la adrenalina, pero al parecer no es lo suficientemente seguro.
Comparte esta historia con tus amigos y familiares y evita accidentes. Recuerda que, muchas veces, el ambiente de diversión puede hacernos olvidar cuán peligrosa es el agua si no tenemos cuidado.