Khloe aún le teme a la oscuridad, habla con dificultad y en ocasiones prefiere dormir con sus padres pero nada de esto le ha impedido convertirse en una valiente heroína para su hermanito de solo nueve semanas de nacido, Colton.
Con sólo cuatro años Khloe ha logrado salvarle la vida a su hermano, al convertirse en su donante de médula.
El pequeño bebé fue diagnosticado con inmunodeficiencia combinada severa (SCID) cuando tenía aproximadamente una semana de nacido. Los pacientes de esta enfermedad son conocidos como “niños burbujas” pues aunque parecen completamente saludables, son sumamente susceptibles a infecciones graves.
De forma específica, este trastorno es causado por mutaciones en diferentes genes involucrados en el desarrollo y la función de las células inmunes; lo cual los hacen unos niños sumamente susceptibles.
Al recibir el diagnóstico, los médicos indicaron a la familia que lo mejor sería un trasplante de médulas madres y por lo general el donante ideal resulta ser algún hermano. En el caso de Colton, tanto Khloe como Krissy, la otra hermana mayor, fueron evaluadas como donantes potenciales.
La familia esperaba que Krissy fuese compatible y pudiese salvar la vida de su hermano, ella también había asumido el asunto con mucha madurez y estaba preparada para hacerlo. Sin embargo, esto no sucedió.
«Mi esposo y yo esperábamos que fuera nuestra hija mayor porque ella entendía y quería ser quien ayudara a su hermano pequeño. Cuando descubrimos que era Khloe, ella estaba realmente emocionada al principio y después el miedo comenzó, en unos 30 segundos se vino abajo y nos dijo lo asustada que estaba«, dijo Kayla Land, madre de los pequeños.
El asunto no fue nada sencillo para Khloe, naturalmente el miedo se apodero de ella y su madre debió intervenir, aunque para nadie fue un asunto sencillo.
«Me sentí muy desesperada porque tenía una hija que estaba sentada aquí muerta de miedo y otro que la necesitaba más que nada. Así que tuve que decirle que su hermano no iba a sobrevivir si no lo hacía», confesó Kayla Land.
Afortunadamente, todo salió de acuerdo a lo esperado y la cirugía que se realizó en el Hospital de Niños Doernbecher de OHSU en Portland fue completamente exitosa.
Los médicos pudieron extraer la cantidad de médula necesaria incluso para conservar dos muestras más para el futuro, en caso de que Colton llegase a necesitarlas.
La familia visitó el «Make A Wish Tree», donde las niñas habían escrito mensajes para la salud de su hermano.
No cabe duda de que todo esto fue una situación dolorosa y difícil para todos, pero en ocasiones la vida nos pone ante circunstancias conflictivas en las que sólo debemos elegir.
Por fortuna, en esta ocasión la elección parece haber sido la correcta y los pequeños se recuperan y preparan para una vida feliz y saludable.
Antes de irte comparte esta nota y que este feliz desenlace sirva de aliento a esas personas que hoy deben tomar decisiones tan difíciles como la que enfrentó esta familia.