Josh Haber era un pequeño conocido su hermosa sonrisa. Era un amante del fútbol y acababa de celebrar por todo lo alto que lo nombraron el capitán de su equipo. Por desgracia, todo se vino cuesta abajo cuando comenzó a sentirse algo débil.
Uno de sus hermanos acababa de pasar por resfriado así que su madre simplemente pensó que debía tratarse de lo mismo. Tan sólo un par de días después su familia recibió la peor noticia de sus vidas y tuvieron que despedirse del pequeño.
Josh partió de este mundo con apenas 9 años.
Todo comenzó con un poco de fiebre así que decidieron que lo mejor sería que descansara un poco. Sin embargo, lo que parecía ser un siempre resfriado comenzó a escalar rápidamente y los médicos no lograban explicarse cómo la salud de un pequeño podía decaer tan rápidamente.
Un día, durante una consulta con el médico sus uñas comenzaron a ponerse azules y llamaron de inmediato a una ambulancia.
Los síntomas de Josh fueron fatiga, fiebre, infecciones, falta de aliento, abdomen hinchado y pérdida de peso.
En el hospital realizaron una serie de pruebas pero todavía no lograban encontrar respuestas. Josh se había quejado de dolor en sus costillas así que Sarah les explicó que había sufrido una fuerte caída.
Una vez más pensaron que ese debía ser el motivo de todos los problemas, pero un examen de rayos X demostró que no tenía ninguna fractura.
Josh tenía dos hermanos uno mayor y el otro menor.
Sin embargo, el pequeño tenía un severo daño esquelético muscular y un esguince cervical en el cuello. Después de un par de días lo enviaron de vuelta a casa pero los problemas no tardaron en volver.
“Algo no estaba bien. Dejó de comer por un par de días. Tomaba agua pero no iba al baño. No podía levantarse porque su pierna le dolía demasiado”.
Fue entonces cuando un análisis de sangre dio la respuesta que dejó a toda la familia en shock. Josh tenía leucemia mieloide aguda. Todavía no habían tenido tiempo de procesar este terrible noticia cuando dos días después el pequeño perdió la vida.
Esta forma de cáncer no es común y suele afectar a personas mayores de 75 años.
La partida del dulce Josh dejó a toda su familia devastada. Sarah decidió dar a conocer su historia para informar sobre cómo los síntomas de esta alarmante enfermedad pueden resultar terriblemente parecidos a un simple resfriado.
“Una semana antes todo estaba bien. Estaba jugando fútbol”.
Nos unimos a la familia de Josh en esta partida tan inesperada y dolorosa. Esperamos que su recuerdo permanezca y su caso ayude a crear conciencia sobre esta terrible enfermedad.
No te vayas sin compartir esta nota para ayudar a que perviva el recuerdo de este dulce niño y dar a conocer los síntomas de esta enfermedad.