La humildad y el desprendimiento son dos atributos que nos vendrían bien a todos, sobre todo cuando se trata de tener bonitos gestos con nuestros semejantes. Tal vez lograr ese nivel de madurez sea un asunto que se gane con los años, como lo ha demostrado Joe Weis, un experimentado piloto comercial de American Airlines.
Joe, quien se encontraba en un vuelo Madrid-Miami junto a su esposa Wendy, vivió un momento muy bonito. No solo para él sino para quienes lo presenciaron y vivieron.
El piloto supo de Ki Klitenick, un niño de 2 años de edad con Síndrome de Down, y cuando terminó el vuelo, le regaló la insignia con alas que llevan los pilotos.
Y pensarás que eso pudo hacerlo cualquiera, sin embargo, el contexto es lo que hace que sea una experiencia maravillosa. En primer lugar, Ki viajaba por primera vez en avión con Sara Tamar, su madre y en el caso de Joe, era su último vuelo como piloto antes de jubilarse.
35 años ha pasado Joe surcando los cielos y el destino le permitió que en este último vuelo en un Boeing 777, se haya encontrado con una personita tan especial. Estaban los dos a mano con la vida: para uno el primer vuelo y para el otro el último. La vida en un instante guiñándoles el ojo.
“Qué hermosa fotografía, el pasado y el futuro encontrándose para seguir viviendo. Qué hermosa forma de terminar tu carrera”, comentó emocionada otra internauta.
My last flight was very special for many reasons. Wendy was sitting in a row with Ki and his mom back from Madrid. She found out that this was his first flight. Since it was my last and his first we decided to make it special. So I pinned my AA Captain wings on him after we landed in Miami. I will remember this always. Thanks to my first officer Kent Thorpe for filming everything
Publiée par Joe Weis sur Lundi 7 octobre 2019
Las alas de piloto son un símbolo muy especial en el mundo de la aviación porque ellas denotan la experiencia del piloto, las horas de vuelo, se trata de una insignia realmente importante y que Joe haya decidido dárselas a un pequeño es lo que hace esta historia insuperable.
“Wow, toda una vida en las alturas. Qué bonito trabajo el del señor Joe. Y qué bueno que haya tenido ese detalle tan significativo con el pequeño, que seguro jugará a ser piloto y trabajar en las alturas”, mencionó otra internauta.
Las redes sociales han comentado muchas cosas al respecto, ya que el momento ha sido muy emotivo, por parte de Joe se trata de todo un homenaje y por parte del pequeño, un hermoso instante que seguro le marcará la vida.
Esta historia es un ejemplo de que está en nuestras manos construir buenos y hermosos momentos. Solo debemos estar atentos a lo que sucede y así convertirnos en protagonistas de nuestras propias historias.
Comparte esta hermosa historia entre tus familiares y amigos para crear consciencia sobre la inclusión y la generosidad que tanto necesitamos en nuestra sociedad.