Jonathan Pinkard es nuestro protagonista, un hombre que tuvo la suerte de toparse con una mujer que sin posturas raras ni apariencias engañosas solo quería ayudarlo.
Pinkard tenía una vida normal como cualquier otro joven, pero el año pasado se enfermó repentinamente y sus médicos le dijeron que necesitaba un trasplante de corazón.
Sin embargo, su vida empezó a derrumbarse al darse cuenta que no cumplía con los requisitos para incluirlo en la lista de trasplante.
Jonathan es de Georgia.
La abuela de Pinkard falleció hace siete años y su madre está en un centro de rehabilitación, el joven no cuenta con ningún otro apoyo familiar, los médicos del Hospital Piedmont Newnan desafortunadamente no pudieron seguir con el procedimiento que le salvaría la vida.
Pinkard presenta un espectro autista, destaca que estaba trabajando cuando tuvo un episodio y sin darse cuenta terminó en el piso. Desde entonces sus visitas en el hospital han sido consecuentes, fue ahí donde conoció a Lori.
Lori Wood es enfermera de la UCI en el Hospital Piedmont Newnan.
Lori es una enfermera del hospital, fue asignada para cuidar al joven en el hospital, señala que no pudo evitar sentirse frustrada cuando le informaron que no podía ser tratado.
Ante la lamentable situación Lori sabía que debía hacer algo. Su lema como enfermera es “arreglar y ayudar” a las personas. Al respecto señala:
Tenían que hacerle pruebas y no querían hacerlas porque, de nuevo, no había apoyo familiar. Entonces, creo que Dios sabe cuándo poner a las personas en ciertas situaciones y darles la opción de hacer algo al respecto”.
Para la noble enfermera no había otra opción y no tenía motivos por el cual no ayudar al joven que tanto lo necesitaba. Tenía, una habitación y podía cuidarlo, el joven debía ir a casa con ella y así fue.
Lori y Jonathan ahora son una pequeña familia.
Lori, quien es una madre soltera le preguntó a Jonathan si quería que fuera su tutora legal, el joven receptivo y muy agradecido aceptó. Tras realizar todo el papeleo legal, finalmente el joven logró recibir el trasplante de corazón.
Un gesto que motiva y hace la diferencia.
De no haber sido por el gesto de Lori el joven hubiera muerto. Ahora ambos han creado un hermoso vínculo, Lori lo acompaña a sus controles médicos y le está enseñando algunas herramientas para la vida.
Jonathan está feliz de haberse encontrado con una mujer que lo trata como a su hijo. La enfermera realizó un hermoso gesto de amor que terminó salvándole la vida a un joven.
Esta historia sin duda, merece llegar a cada rincón del mundo. Compártela en tus redes.