Lamentablemente, Cameron, un bebé de 9 meses perdió la vida tras ahogarse en la bañera de su casa. La policía atendió el llamado de emergencia que informaba que el pequeño se estaba poniendo azul alrededor de las 11:30 a.m., pero no pudo hacer nada.
Cuando los agentes del alguacil del condado de Martin llegaron encontraron a Shawn Davis, de 30 años, realizando RCP a su hijo Cameron, y aunque ellos se hicieron cargo, ya el bebé estaba sin vida.
La madre del bebé, Heather Clifford, de 29 años, dijo que había dejado al bebé en la bañera con sus hermanos uno de 2 años y otro de 3 años solos en la bañera durante unos 20 minutos mientras se llenaba de agua.
Nunca debemos subestimar este tipo de situaciones, en cuestión de segundos pueden ocurrir hechos como este que no se podrán superar jamás.
Heather confesó que ella y su esposo se habían quedado dormidos cuando sucedió la tragedia.
Los resultados de la autopsia determinarán cuál fue la causa de la muerte de Cameron y sus padres podrían enfrentar cargos criminales, según las autoridades.
«Todo esto es muy sospechoso, y también prevenible. Consultaremos con la Oficina del Fiscal del Estado sobre la posibilidad de que el cargo penal continúe», dijo el sheriff del condado de Martin, William Snyder.
El sheriff Willian reveló que esta no era la primera vez que sus agentes visitaban la casa de la familia, ya habían ido 3 veces. También dijo que había registrada una llamada al Departamento de Niños y Familia de Florida.
Una vecina declaró que ella y su esposo habían llamado a las autoridades estatales de bienestar infantil en las últimas semanas cuando los hermanos de Cameron estaban afuera de la casa apenas vestidos, y los padres aparentemente dormían mientras el bebé lloraba.
Los registros policiales revelaron que estos padres tenían antecedentes de arrestos previos por delitos tales como conducción imprudente, falta de registro de un vehículo de motor, suministro de información falsa a un agente de empeño, entre otros.
Indudablemente este trágico accidente ocurrió por la negligencia de los padres y es un llamado en general a todos los que tienen a su cargo el cuidado de niños a tomar las previsiones para evitar desenlaces fatales.
Los estados deberían revisar las leyes y proteger a estos seres indefensos de quienes, en teoría, deberían cuidarlos y atenderlos.
Lamentablemente este caso tuvo el peor final, la irresponsabilidad de una pareja le costó la vida a un pequeño inocente. Compártelo.