El pasado domingo el helicóptero en el que viajaba Kobe Bryant junto a su hija Gianna de 13 años y a otras siete personas sufrió un trágico accidente que no dejó supervivientes.
Un testigo ocular declaró que no percibió ninguna anomalía en el motor del helicóptero. Scott Daehlin, fue una de las primeras personas que contactó a los servicios de emergencia tras el siniestro.
“Parecía estar funcionando bien la aeronave, presume que la causa fue la falta de visibilidad por la niebla”, declaró ante los medios.
Un grupo de ciclistas de montaña alertaron a los bomberos y a la policía del condado de Los Ángeles tras percibir la nube de humo causada por el impacto del helicóptero en el área de Calabasas en California.
Las autoridades investigan las causas del fatal accidente, los reportes meteorológicos del domingo destacan la niebla y la falta de visibilidad en la zona.
Poco antes de las 10 de la mañana el helicóptero impactó contra una zona montañosa de Las Vírgenes Road en Calabasas, California, donde residen muchas celebridades del espectáculo y deportistas destacados.
Los bomberos acudieron al lugar, un área de difícil acceso, para apagar las llamas en las que quedaron envueltos los restos del helicóptero.
Daryl Osby, jefe de bomberos del condado de Los Ángeles, informó que tuvieron que escalar para acceder al lugar del accidente, comentó que los restos estaban dispersos en un área del tamaño de un campo de fútbol americano.
“Nuestros bomberos caminaron hasta el lugar del accidente con su equipo médico y mangueras para extinguir el incendio, que también incluía un incendio forestal aparte del del helicóptero”, resaltó Daryl.
Gavin Masak, un vecino de la zona dijo ante los medios locales: “El sonido del accidente no fue exactamente como el de una explosión, fue como un fuerte estallido. Sonaba como un helicóptero, pero sonaba como un avión, como si fuera fuerte”.
“Cuando salí, vi humo en la colina, no era como una gran nube de humo, era gris”, agregó. Como el helicóptero impactó en un área apartada de las viviendas, no hubo ningún lesionado.
El jefe de la policía dijo que podrían necesitar hasta dos días para concluir el proceso de la recuperación de los cuerpos de las víctimas y varias semanas para terminar la investigación que determinará las causas del accidente.
El Servicio Meteorológico Nacional de Estados Unidos, informó que aunque la intensidad de los vientos no era fuerte, había muy baja visibilidad en la zona a causa de la niebla.
Incluso, el Departamento de Policía de Los Ángeles, decidió dejar en tierra los helicópteros que usan para cumplir con las tareas de vigilancia de la zona debido a las condiciones del clima del pasado domingo.
Josh Rubenstein, vocero de la policía, dijo: “La niebla era suficiente como para no volar”.
La primera hipótesis que se maneja es que el accidente se haya producido por la falta de visibilidad del piloto, sin embargo, hay que esperar que concluya la investigación. El piloto recibió una advertencia porque volaba a un nivel muy bajo.
El helicóptero fue identificado como un Sikorsky S-76 fabricado en 1991 por la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos. La empresa fabricante se pronunció para expresar sus condolencias a los familiares de todas las víctimas y se puso a la orden para apoyar a las autoridades en la investigación del accidente.
“La seguridad es nuestra principal prioridad; si hay hallazgos en la investigación con los que se puedan tomar acciones, informaremos a nuestros clientes del S-76”, dice parte del comunicado.
En una rueda de prensa, el jefe de bomberos de Los Ángeles, Daryl Osby, informó que a las 9:47 de la mañana del domingo recibió el primer reporte del accidente. Un total de 56 personas se dirigieron al lugar para ayudar con las labores de rescate, en el equipo había bomberos, rescatistas y paramédicos. No fue una labor fácil extinguir las llamas.
“El fuego incluía magnesio, que resulta muy difícil de extinguir para los bomberos porque reacciona con la presencia de oxígeno y agua.
En la escena comprobaron que no hubo ningún superviviente después del siniestro, algunos cuerpos han sido recuperados y a través de una prueba de ADN realizarán la identificación según la ley.
“Podemos tardar un par de días para recuperar los cuerpos”, confesó el médico forense Jonathan Lucas, quien resaltó que el terreno y la condición del sitio dificulta las labores.
“Nuestra próxima prioridad es la identificación de los cuerpos y la notificación a las familias. Lo haremos tan pronto como podamos”, dijo Lucas.
El mundo sigue atento a los avances de la investigación del siniestro que acabó con la vida de la leyenda del baloncesto Kobe Bryant, su hija de 13 años y otras 7 personas. Comparte este avance.