El día de la boda para muchas parejas se convierte en una gran sueño por cumplir. Un mar de sentimientos y emociones se entretejen en medio de los preparativos, pero sin duda quienes más ansiedad pasan por que todo salga como lo visualizaron, son las novias.
¿Pero y qué pasa con los novios? Nos podemos encontrar de todo: desde los que viven todo con la misma pasión que su prometida; hasta los que les da exactamente lo mismo. Pero yendo más lejos, quedan otros para los que el día de su boda se puede convertir en una verdadera pesadilla.
Esta historia parece sacada de película, pero es real. Sucedió en China, y se trata de un joven cobarde que no sabía cómo hacer para enfrentarse a su prometida y decirle que en realidad no quería casarse.
En vista de la inminencia de la boda, y encontrándose entre la espada y la pared, no vio mejor forma para no casarse, que la Policía lo detuviera. Y así, privado de su libertad, tendría la mejor excusa para no tener que dar su sí a la fuerza.
El hombre se llama Chen y los hechos sucedieron la semana pasada
Lo que a Chen se le pasó por la cabeza fue que si hacía algo lo suficientemente decepcionante para su novia, a lo mejor ella desistiría de verlo como el hombre de su vida, y así ya no lo buscaría más. ¿No era más fácil decirle directamente que no la amaba?
¡Pero no! Este peculiar sujeto se fue por la vía más rebuscada, así que entró en una academia de danza en la calle Huashan Road, en Shangai, y sin dudarlo, robó un gran altavoz valorado en 287 euros.
Para su «suerte», como no siempre sucede, tras la denuncia del dueño, los oficiales de la policía no tardaron en rastrearlo y lo detuvieron el mismo día del robo.
Cuando lo interrogaron abrió su corazón y confesó por qué lo había hecho ante el asombro de los policías que no podían creer en su descabellada historia.
«Mi novia quiere casarse, pero yo no quiero. Sabía que me atraparían, aunque no pensé que fuera tan rápido», confesó Chen. «En realidad quería alejarme de ella, pero no sabía cómo hacerlo».
Admitió robar el altavoz y dijo que deliberadamente eligió ese dispositivo en particular porque sabía que no le costaría demasiado dinero al propietario.
Ahora Chen permanece bajo custodia, pero no estará durante mucho tiempo puesto que se trata de un delito menor.
Lo que queda claro es que seguramente la pobre chica se decepcionó enormemente de Chen, como era su objetivo. Pero no sabemos si es que su amor por su prometido es tan fuerte que incluso lo perdone, y el hombre tenga que inventarse una nueva excusa para evadirla.
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