Rodrigo Contreras Díaz, de 41 años, y Melin Velasco, de 31, no son una pareja típica pues desde que se conocieron, en el 2012, estos esposos han llevado su relación de forma bastante intensa.
El empresario de marketing conoció a la nutricionista y quedó flechado de inmediato, sólo un día bastó para que formalizaran su relación y Rodrigo le pidiera ser su esposa. Una petición a la cual Melin no se resistió y en sólo una semana planificaron la boda.
Pero esta historia no es sólo de un amor acelerado, sino algo diferente.
Desde un inició en hombre de Monterrey, México, explicó a la enamorada que aunque la amaba no estaba dispuesto a tener una relación monógama. Este hombre llevaba un estilo de vida alternativo y quería iniciarse en el poliamor, algo a lo cual la nutricionista también aceptó.
Tras años de fortalecer su vínculo y amarse locamente, los jóvenes esposos decidieron estar listos para incluir a otra persona en su pequeña familia.
Se trataba de una escolar de 18 años, a la cual Rodrigo había conocido en un bar en el que trabajaba como camarera. De este modo surgió el segundo flechazo para este mexicano.
Su nombre es Lucy y desde 2016 pasó a formar parte de este matrimonio de tres.
La joven confesó sentirse un poco extraña cuando Rodrigo comenzó a coquetearle en el bar frente a su pareja. Sin embargo, después de una hora de conversación, Lucy supo cuál era el estilo de vida de estos esposos y, aunque no había escuchado antes del poliamor, también cayó rendida ante los encantos del empresario.
Rodrigo y Melin, aseguran que incluir a Lucy los ayudó a fortalecer más su vínculo y aunque ellas son heterosexuales se llevan muy bien y comparten todo lo referente a la vida en pareja.
“Nuestra relación es como cualquier otra, una relación en la que nos apoyamos, nos entendemos y nos amamos, con la simple diferencia de que mi esposa lo aprueba y aplaude, también hay amor y comprensión entre ellas, así como mucho respeto”, dijo Rodrigo.
Para el empresario y su esposa, las relaciones poliamorosas han sido estigmatizadas por la sociedad. Una situación en la que según ellos, han intervenido mucho el cine y la televisión que se han encargado de vender una realidad que no es a ciencia cierta el verdadero poliamor.
Frente a esta postura, los esposos han considerado llevar su historia a la gran pantalla y demostrarle a la sociedad que ellos funcionan del mismo modo que cualquier otra pareja.
“Queremos hacer un cortometraje que exprese las realidades del poliamor, notamos que el estereotipo que se maneja en el cine sobre el poliamor difiere mucho de la realidad, y es por eso que nos gustaría hacer un cortometraje que profundice más en el aspecto humano de la vida compartida en tres corazones”, dijo el empresario.
Rodrigo está consciente de que debe mantener un vínculo bastante cercano tanto con Lucy como con Melin: “Como tríada, mi plan es acercarme cada día, no sólo en términos físicos, sino también en el corazón y los sentimientos de cada una”.
Mientras logran llevar su historia al cine, este trío planea continuar nutriendo su amor y no están dispuestos a discutir su relación con nadie. Comparte esta historia y déjanos saber tu opinión sobre este matrimonio que ha causado polémica.