Laura Smith es una joven madre de 25 años de edad, de Michigan, Estados Unidos, que se ha tenido que enfrentar a duras críticas por su polémica decisión de la lactancia prolongada.
Ella sigue amamantando a sus hijos: Joel, de 5 años; y Bennett, de 2. Y jura que lo seguirá haciendo hasta que por lo menos tengan 8 años, o hasta que ellos decidan que ya no quieren más leche materna. Dice que no piensa negárselo.
Joel y Benett son amamantados hasta 3 veces al día junto a otros alimentos sólidos, propios para su edad
Laura asegura que la buena salud de sus hijos no se debe más que a los poderosos nutrientes de su leche y que además le ha generado un increíble vínculo con sus pequeños, que no lo cambia por nada.
«Los beneficios inmunes son tan enormes. Joel y Bennett nunca han tenido gripe, una infección de oído, ni han necesitado medicamentos para nada. La gente no se da cuenta de cuántas vitaminas y nutrientes hay en la leche materna», revela.
Laura y su esposo Zane, de 28 años, trajeron al mundo a su hija mayor, Joel, en mayo de 2015.
A pesar de que los médicos le insistieron en que a los 6 meses dejara de dar de lactar, cuenta que la pequeña se resistía a dejarlo. Para ella no era novedad que los niños fueran amamantados hasta más grandes, debido a que en su casa era costumbre.
«Mi madre nos dio de lactar a mí y a mis cuatro hermanos hasta que tuvimos cuatro y cinco años», cuenta Laura.
Cuando Joel ya cumplió 8 meses, empezó a darle algunos alimentos sólidos como el aguacate, las manzanas y las peras. Pero la pequeña seguía pidiendo su leche, hasta 6 veces al día. «Cuando me di cuenta, Joel ya tenía 1 año», declara.
En noviembre de 2017, Laura dio a luz a su hijo menor, Bennett.
Entonces las cosas se complicaron porque era realmente difícil para la madre negarle el pecho a Joel (en ese entonces de 2 años), porque ahora tenía que amamantar al bebé.
Temerosa de que Joel se sintiera demasiado celosa, Laura pronto comenzó a amamantar a sus hijos a la vez.
Bennett también comenzó a comer algunos alimentos sólidos, pero conforme fue creciendo, al igual que su hermana, se resistía a dejar de ser amamantado. Y ya ninguno quería ser alimentarse por separado, sino a la vez, y en el lugar que sea.
«No hay nada que ame más que cuidarlos, nos acerca a todos. Los alimento en los parques, el zoológico o donde sea que lo necesite», dice la madre.
Orgullosa de su experiencia en la lactancia, ahora con su hija ya con 5 años, decidió publicar una foto en la que les daba de lactar a la vez. Y no tardó en hacerse viral, pero por la ola de críticas e insultos que recibió.
«¡Qué asco!», «Eres vieja», «Deberías ya dejarlo», fueron algunos de los comentarios que recibió. Además, cada vez que lo hacía en público, solamente recibía señalamientos y gente que la miraba con desprecio.
A lo que Laura responde:
«Es una tontería que algo tan hermoso y natural sea mal visto. La gente no tiene idea. Carecen de educación sobre la lactancia materna prolongada y a mi me encanta enseñarles».
Tras la ola de críticas, ella sólo asegura que sus hijos son sanos, seguros y felices gracias a la lactancia.
Espera que otras madres se animen a amamantar prolongadamente porque es lo mejor que le ha pasado.
Aunque afortunadamente cuenta con el apoyo de su familia, después de todo el rechazo que recibe, ahora dice que evita alimentarlos en los centros comerciales, para evitar el drama.
Déjanos saber qué opinas del caso de esta polémica madre que se resiste a dejar la lactancia prolongada. ¿Crees que realmente es beneficioso para sus hijos como ella dice? ¡Compártelo!