Es increíble que algunas personas sean capaces de apropiarse de lo ajeno como si se tratara de una gracia.
Este caso nos muestra un vídeo captado por las cámaras de seguridad de una vivienda que deja en evidencia a una mujer que se robó un ramo de flores que habían dejado al pie de la puerta de la casa.
En las imágenes podemos ver a un automóvil que transita por una de las vías de Valle de Bravo, Estado de México, que pasa frente a la casa donde se detiene para que se baje una mujer apresuradamente dejando la puerta abierta y con una sonrisa de oreja a oreja.
Lo que nunca se imaginó esta joven era que estaba siendo filmada por las cámaras de circuito cerrado de vigilancia.
La mujer corre hasta llegar a la puerta y se agacha para recoger algo, y efectivamente era un ramo de flores que nunca llegó a su destinatario original.
Era evidente que las flores eran una encomienda que debía recibir alguien de la casa y que probablemente sería sorprendido, pero que gracias a esta joven no pudo ser.
Una vez que la amiga de lo ajeno tiene las flores en la mano se devuelve rápidamente al automóvil en el que ingresa y cierra la puerta para que este se vuelva a poner en marcha.
El vídeo fue publicado con una leyenda reflexiva sobre el incidente.
#DeNuestroInbox
Ayer por la tarde me dejaron unas flores en la puerta de mi casa, pero pues hubo alguien que por flores se dio a conocer lo rata que son, espero y mi detalle te haya hecho feliz, disfruta mis flores. No contaba con que había cámara #ValledeBravo #EdoMéx pic.twitter.com/xOyfr9JUfu— Qué Poca Madre (@QuePocaMadreMex) July 14, 2020
“Ayer por la tarde me dejaron unas flores en la puerta de mi casa, pero hubo alguien que por esas flores se dio a conocer lo rata que es, espero mi detalle te haya hecho feliz, y disfrutes mis flores”, decía el escrito publicado junto al vídeo.
El automóvil donde viajaba la mujer era un taxi, por lo que se presume que ella le dio instrucciones al chófer que se detuviera porque algo había llamado su atención.
Esta joven hizo su fechoría a plena luz del día y dejó a un enamorado entendiendo porque gracias a este incidente las flores no cumplieron su objetivo.
Esta mujer se bajó, caminó hasta la puerta y se robó el ramo sin el menor rastro de vergüenza en su cara, sino al contrario, nunca dejó de sonreír, quizás para ella eso era una gracia, pero lo cierto es que deja mucho que desear sobre sus valores.
No sabemos qué pasaría con esta mujer, pero lo que sí sabemos es que ante los ojos del mundo su imagen ya no es la misma. Comparte este insólito robo.