La pérdida de un ser querido siempre es algo difícil, pero resulta aún peor cuando los padres deben despedirse de sus hijos. No hay palabras que determinen la condición de alguien que ha tenido que decirle adiós a un ser al que le dio la vida y ese sufrimiento lo acompañará por siempre.
Algunos padres, en busca de consuelo, intentan honrar la memoria de sus hijos con un acto solidario hacia otros en honor a su ángel.
De tal modo lo ha hecho Joel Oliveira, quien tras la muerte de su pequeño decidió cambiar sus largas jornadas de trabajo por una causa justa que dejara un legado en honor a su hijo fallecido.
Joel perdió a su pequeño Lucas cuando tenía sólo 2 añitos de edad, el cáncer le arrebató la vida así que decidió hacer algo para luchar contra ese monstruo.
«No quiero que otros padres pasen por lo que yo pasé”, ese ha sido el principal motivo por el cual Joel decidió hacer un cambio radical en su vida y ahora sus años de dedicación han dado resultados.
Joel creó un dispositivo que funciona con inteligencia artificial y técnicas de aprendizaje automático. Este invento es muy similar a una tirita y se encarga de enviar información directamente al hospital sobre los cambios en el cuerpo del paciente.
El invento de Joel fue bautizado como Weareable y, de forma más precisa, recopila datos como el aumento o la disminución de la temperatura corporal y el cambio en la frecuencia de los latidos del corazón. Toda esta información es compartida en una nube en Internet a la cual tienen acceso los médicos y familiares del niño.
Este invento vigilará de manera permanente al niño y además, permite al médico optimizar el tratamiento de cada paciente. Ante cualquier cambio repentino, el dispositivo emite una alerta.
“No sólo estás usando la tecnología, el padre y la madre tienen la tranquilidad de que a la condición de su hijo se le hace un seguimiento exhaustivo. Las familias ven un hilo de esperanza de que sus hijos se sientan más cómodos durante el tratamiento”, dijo Joel.
El dispositivo ya ha sido probado y Luckie Tech, la empresa creada por Joel, busca padrinos que puedan apoyar el proyecto y hacer posible que todos los pacientes del Hospital de Atención al Niño con Cáncer (GACC), en São José dos Campos (SP), reciban uno. Este es el mismo centro de salud en el que Lucas estuvo hospitalizado más de un año.
Joel es ingeniero y presidente de una multinacional pero ahora está comprometido con Lukie Tech y su proyecto. De hecho, el nombre que en español significaría suerte, hace referencia también a su hijo Lucas.
Para este padre sus días ya no están marcados con la tristeza, encontró el propósito de ayudar a otros niños: «No miro este proyecto con tristeza, sino con alegría de poder ayudar a otras personas», dijo el empresario.
El gesto de solidaridad de este padre ha emocionado a miles de personas en las redes, no te vayas sin compartirlo.