Prafull Billore, es un joven indio de 22 años que dejó la universidad para vender té en la calle y gracias a su constancia y perseverancia ha ganado más de 40 mil dólares.
La historia de Prafull es una evidencia de que los sueños pueden hacerse realidad, pero hay que luchar por ellos, sin importar lo que digan los demás, siempre van a existir personas que critican o lo tildan como una locura.
Todo sueño requiere de esfuerzo y trabajo, ejemplo de ello es Prafull quien creó un negocio de té con el que ha llegado a facturar 41.300 dólares, ahora su marca es reconocida en el mercado de su país.
El joven dejó sus estudios tras no tener una buena calificación en las pruebas de admisión. Tras no poder ingresar en ninguna universidad decidió crear un emprendimiento, se trataba de algo que había pensado cuando trabajaba en un restaurante de su ciudad.
“Las personas que se burlaron de mí, ahora me piden consejos. Yo les digo que el título no importa, pero el conocimiento sí’”, dijo Prafull.
Al principio no todo era color de rosa, siempre cuando se inicia un negocio hay cosas que pueden resultar un poco complicadas debido al desconocimiento de cómo funciona tener un emprendimiento propio. Pero no por eso quiere decir que es imposible.
Inicialmente Prafull solo vendía unas pocas tazas de té e incluso estropeó algunos pedidos. También se enfrentó a la negativa de sus padres, quienes seguían insistiendo que se dedicara a estudiar.
Con el tiempo el joven fue tomando más confianza, y su emprendimiento comenzó a crecer en ventas, en un mes logró ganar más de 200 dólares. La historia de este joven indio empezó a aganar popularidad en todo el país, y fue así como su negocio de té en la calle pasó a ser famoso.
Prafull reconoce que se sintió devastado y frustrado cuando supo que le había ido mal en las pruebas de admisión de la universidad.
“Decidí hacer una pausa y viajar. Mis padres querían que obtuviera un título y no estaban de acuerdo con que me fuera“, dijo Prafull.
Cuando regresó a su ciudad, se dedicó a estudiar y trabajar, pero él sentía que aprendía más como cajero que como estudiante. Esta situación lo impulsó a comenzar su viaje en las calles de la India sirviendo té.
“Me encanta lo que hago”, agregó Prafull
Recientemente cumplió el sueño de abrir su primer café y su franquicia “MBA Chai Wala” se ha esparcido por toda la India.
“Con el tiempo, el negocio creció y comencé a vender bocadillos junto con chai y pronto tuve la suerte de establecer mi propio café y decidí llamarlo MBA Chai Wala”, dijo Prafull.
Realmente la historia de este joven es un ejemplo para el mundo… ¡No dejes de compartirla!