Desde que salió a la luz la polémica separación de Shakira y el defensa del F.C. Barcelona, todos los dedos acusadores se han posado sobre Piqué. Especialmente porque el primer rumor que se divulgó intensamente en la prensa, fue el hecho de que la cantante hubiera encontrado a su pareja con otra mujer.
El mundo señala a Gerard Piqué como infiel, mujeriego, inmaduro…
Aunque la mayoría de los fans de la pareja se inclinó al lado de la cantante, y no dudaron en ofrecerle infinitas muestras de apoyo al ser ella la engañada, lo cierto es que «no todo es blanco y negro». Y en una crisis de pareja, siempre hay dos partes de la historia.
Definitivamente, tal como se mostraron a los medios los hechos, y como presuntamente sucedieron en la realidad, el futbolista pronto se convertiría en la diana de críticas e insultos «por haber dejado escapar a semejante pedazo de mujer».
Lo criticaron muy duramente, sobre todo porque tras doce años de noviazgo y dos hijos en común, Gerard Piqué habría decidido poner el punto final a su relación con Shakira.
¿La razón? Porque el amor se esfumó, estaría cansado de su vida junto a una mujer de la que un día se enamoró, sí, pero que hoy con 45 años, no le llena. Quiere empezar otra vida y punto.
El futbolista y la cantante llevaban más de tres meses separados antes de que Shakira anunciara su separación.
Pero, puertas hacia adentro de esa convulsionada relación, que ahora ha dejado lágrimas, resentimientos y heridas profundas en la cantante, lo triste es que ella sigue absolutamente enamorada. Mientras que Piqué, parece haber pasado página.
Tanto es así que se negó rotundamente a los intentos de Shakira de querer volver, cuando ella hizo de todo para recuperarlo en dos ocasiones.
Sin embargo, fuentes cercanas al astro catalán han revelado que llevaban mucho tiempo muy desgastados y que «la ruptura no tiene nombre de mujer».
Pero, la novedad ahora es que ya rota la relación, Piqué está sumamente molesto con su ex por cómo se han dado los acontecimientos.
«No perdona ni olvida la traición que supone que Shakira haya permitido que personas allegadas a ella expliquen en televisión que está lánguida y llorosa, que se encuentra recomponiéndose y apenada, como si para él esta situación fuera agradable o baladí», dijeron las fuentes.
«Las confesiones privadas y públicas no le están sentando nada bien porque ambos tenían códigos que ahora parecen incumplirse», agregaron.
Así, por ejemplo, Lucía Mebarak, cuando le preguntaron sobre la separación de su hermana, dijo: «Es algo que ya nos esperábamos».
«¿Pero qué os pensáis, que él está todo el día con unas y con otras? Por favor, hay que ser un poco serios en esto y recordar que cada uno sobrelleva las rupturas como puede», explicó, por su parte, un gran amigo del círculo íntimo de Piqué.
A todo lo anterior, se suman las declaraciones de José Antonio Avilés, en el programa Viva la Vida, quien aseguró que en el entono cercano de Piqué, «están muy sorprendidos y molestos con el comunicado que Shakira ha enviado a través de su agencia de comunicación».
Básicamente por haber sido ella quien tomó la iniciativa, cuando según los amigos y familiares del futbolista, en realidad «no hubo infidelidad, desde hace 3 años habían decidido llevar una relación abierta, lo que implicaba que ambos tendrían absoluta libertad para conocer y frecuentar cualquier tipo de personas».
«Las fuentes cercanas al futbolista desmienten que la pareja haya puesto punto final a 12 años de relación por una infidelidad de Piqué, y reiteran que el distanciamiento viene por un desgaste de la convivencia», dijo por su parte, la periodista Silvia Taulés.
Las diferencias entre ellos son grandes, y las versiones de cada lado de la pareja parecen no coincidir en absoluto. Ahora lo que preocupa enormemente a todos sus seguidores es cómo afectará todo esto a los pequeños Milan y Sasha.