Este vídeo es la sentida respuesta de Jeff Louis, un repartidor de pizza que recibió la mejor propina de su vida y ni siquiera estamos hablando de los 700 dólares que le dieron las personas a quienes entregó la pizza.
Una iglesia de Ohio en EEUU llamó a tres lugares diferentes para pedir 8 pizzas para una celebración especial que tendrían esa mañana. Gioninno´s fue el único sitio que les dijo que aceptarían el pedido.
Cuando Jeff llegó al lugar de la inusual entrega matutina algunas personas le pidieron que tomara una de las pizzas y la llevara directamente al pastor. Él estaba extrañado, no se imaginaba que el pastor ya había anunciado a la comunidad que por acercarse la Navidad le darían 100 dólares al repartidor que les llevara la pizza.
Pero lo que pasó después sobrepasó todos los actos de generosidad que este joven había experimentado en su vida. ♥ Y lo que la comunidad de esta iglesia no sabía es que el dinero no sería lo más importante de este acto de generosidad. Sin imaginarlo ellos devolvieron la esperanza a un joven que se había rendido completamente. ¡Tienes que verlo!
Después de esta experiencia Jeff escribió en su Facebook “Hoy me dieron mucha esperanza y estoy muy agradecido. No puedo explicar con palabras todo el agradecimiento que siento.Todavía me sorprende el amor y la amabilidad que todos me mostraron hoy. Gracias a todas las personas de la iglesia. Esta fue una experiencia que llevaré conmigo el resto de mi vida”.
El pastor piensa que esto no fue una coincidencia, fue algo que tenía que suceder.
El dueño de la pizzería también comentó que el joven repartidor llegó al local saltando de felicidad y que lo primero que hizo fue compartir una parte del dinero con sus compañero de trabajo. De verdad esto fue un momento muy especial para muchas vidas. Lo mejor de este maravilloso acto de generosidad desinteresada es que el dinero fue lo menos importante. Jeff termina su video con una palabra “Blessed” (Bendecido) y realmente no hay otra forma de explicar esta extraña coincidencia.
“La gente no entiende que yo básicamente me había rendido en la vida. Ellos me devolvieron la esperanza, me hicieron sentir apreciado y que yo puedo ser importante para alguien.”
Jeff sentía que no valía nada, que no era importante y estas personas sin conocerlo le hicieron sentir que su vida tenía significado.
La gran lucha de este joven se debió a una lesión de hombro que se complicó con muchas cirugías. Pero cuando empezó a necesitar cada vez dosis más altas de los fuertes sedantes que le prescribían, decidió buscar ayuda.
Justo antes de recibir esta propina había tenido una fuerte recaída y había dejado de creer en sí mismo. Él había perdido la esperanza en alcanzar algún día la recuperación.
Jeff incluso ha ofrecido devolver el dinero, pues para él lo más importante fue la generosidad.
Comparte esta maravillosa historia, a veces las coincidencias nos dejan entrever algo más allá.