La naturaleza es sabia, y gracias a eso este bebé logró sobrevivir después de haber sido enterrado vivo por su madre al nacer.
Realmente es muy difícil encontrar alguna explicación sobre algunos comportamientos que carecen de cordura y tan faltos de amor. Lucinda Ferreira Guimaraes de Curitiba, Brasil, es una madre que al parir en el bosque enterró a su bebé vivo dejándolo abandonado.
Afortunadamente, un vecino percibió algo sospechoso. Notó que su vecina embarazada había salido en la mañana y al caer la tarde regresó con su ropa manchada de sangre.
Este vecino no pasó por alto los movimientos extraños Lucinda y decidió buscar en la zona para averiguar que estaba pasando. Regresó a su casa cuando cayó la noche, con la intención de seguir buscando el día siguiente.
Finalmente encontró saliendo de un agujero lleno de fango la cabeza de un bebé, cubierta de moscas.
No podía creer lo que estaba viendo e inmediatamente se comunicó con la policía. Pensaba que el bebé estaba muerto, no hacía ningún movimiento. Al llegar las autoridades sacaron el cuerpo del recién nacido cubierto de barro y fue cuando empezó a llorar.
Posteriormente se confirmó que el bebé había sobrevivido gracias a que la lluvia quitó el barro de su cabeza y pudo ser descubierto.
Otro factor que influyó de manera determinante para que el bebé continuara con vida, fue que el cordón umbilical y la placenta estaban unidos e impidió la pérdida de sangre y pudo alimentarse de los nutrientes que aún estaban en la placenta.
También salvó la vida del pequeño la reacción de este valiente vecino que no se dio por vencido al escuchar su corazón y acudió al lugar para saber qué estaba pasando.
Resultó que esta mujer había dado a luz en el bosque, a unos 300 metros de distancia de la casa y con el corazón de piedra lo enterró vivo. ¡Es desgarrador!
La policía arrestó a esta miserable mujer, quien nuca admitió que era madre y que había enterrado a su hijo recién nacido.
La prensa local informó que Lucinda fue encarcelada y el bebé fue entregado a su padre biológico.
Actualmente este pequeño debe tener 11 años, aunque al nacer fue víctima de una de la mayor crueldad, también fue bendecido con una segunda oportunidad de vida y esperamos que tenga todo el amor y la felicidad que merece.
Nos consuela saber que tuvo un final feliz a pesar de ser víctima de un acto tan cruel cuando llegó a este mundo.
No ser indiferente una situación extraña definitivamente puede ayudar a alguien que esté en peligro, y hasta salvar una vida como sucedió en este caso. ¡Comparte esta impresionante historia con tus seres queridos!