Afortunadamente los avances en el campo de la medicina permiten diagnósticos más certeros y oportunos, también permiten el tratamiento de algunas enfermedades que antes eran incurables.
Iria es una niña de 10 años que padece una enfermedad muy rara conocida con el nombre de nefronoptisis tipo 9.
Esta pequeña se convirtió en la primera niña que recibe un triple trasplante de corazón, hígado y riñones en el hospital Vall d’Hebrón en Barcelona, España.
Iria es el primer triple trasplante pediátrico de España y el primero en el mundo con esta extraña mutación genética.
Esta enfermedad provoca que las fibras de los órganos se le endurezcan hasta que dejan de funcionar, es muy extraña y no más de 15 personas han sido diagnosticadas con esa mutación del gen NEK8.
La esperanza de vida de los niños que padecen nefronoptisis tipo 9 es de tan solo meses, y muchas veces nacen sin vida.
Esta pequeña no solo es el primer infante que recibe un triple trasplante, sino que es la persona que más tiempo ha sobrevivido con esta enfermedad.
Es inevitable que, en estos momentos, la familia de Iria recuerde a su hermano mayor que falleció por este mismo padecimiento.
Iria fue trasplantada del corazón cuando tenía cinco meses tras haber nacido con problemas cardíacos. Su nuevo corazón tardó unos días en funcionar bien, pero después comenzó a hacerlo perfectamente y con él ha estado viviendo desde entonces.
En ese momento los médicos no sospecharon que padecía esa mutación que provoca un padecimiento progresivo.
Su hígado empezó a presentar algunos problemas, pero fue controlado con medicación.
A los 8 años sus riñones empezaron a fallar y sufrieron un rápido deterioro que obligó a los médicos a someterla a diálisis.
En ese momento los especialistas del Hospital Vall d’Hebron de Barcelona descubrieron que padecía esta extraña enfermedad y decidieron hacer un doble trasplante hepático-renal.
Era la primera vez que un menor en España era sometido a un trasplante de estos tres órganos vitales. En octubre del año pasado recibió el trasplante de hígado y riñón.
En el Hospital Vall d’Hebron le dieron una nueva oportunidad de vivir a esta pequeña.