Madison Kohout es una joven de 19 años que sin darse cuenta se mudó a un apartamento para ancianos. A través de sus redes sociales, Madison comparte un poco de su día a día.
Fue así como conoció a Lori Parker, una señora que le brindaba consejos y todo el amor maternal que Madison podía necesitar.
Fue una hermosa amistad y después de pasar más de un año intercambiando mensajes, Lori invitó a Madison a pasar juntos el día de Acción de Gracias.
Desde entonces, Madison se volvió muy unida a la familia Parker. Después de todo, ella había pasado una infancia muy difícil. A los 17 dejó su hogar y comenzó a velar por sí misma, pero ahora contaba con la ayuda de Lori.
Un día, Lori le sugirió que debía mudarse para que se encontraran más cerca. Madison no lo pensó dos veces y comenzó a buscar apartamentos en Arkansas. Hubo uno en especial que llamó su atención y decidió firmar el contrato de alquiler sin conocerlo.
Después de pasar un par de días en su nuevo hogar, Madison vio un letrero en la entrada de las Residencias que la dejó en shock: “Apartamentos para Ancianos”. Se trataba de un lugar donde cada una de las casas estaba diseñaba especialmente para personas de la tercera edad.
También se encontraba un poco lejos para poder brindar a los abuelitos la tranquilidad que tanto necesitaban. Madison no tenía ni siquiera 20 años, pero el dueño del apartamento no tuvo problema alguno en alquilarle el lugar.
“En cuanto vi el letrero, todo hizo clic. Pensé: ‘Oh, Dios mío. No puedo creer lo que hice’”, aseguró Madison.
A pesar del curioso error, Madison ha quedado encantado con su nueva casa y con sus vecinos. Ha formado una relación muy bonita con todos los abuelos y no para de compartir en las redes las incontables maravillas de vivir en un lugar así.
Los ancianos del lugar siempre la invitan a cenar, le preguntan sobre su día y hasta le dejan deliciosas golosinas en su puerta. Además, nadie tiene ningún problema si escucha música al llegar porque casi todos tienen problemas de audición.
“Es como tener muchos abuelos. Son muy dulces. Tuve mucha suerte”, dijo Madison.