A cualquier persona le gustaría haber crecido en un hogar sano y rodeado de amor, pero no todas corren con la misma suerte. Es por esta triste realidad que la noticia de una adopción debería significar una gran alegría para cualquiera.
Todos los niños tienen derecho a ser felices y a partir de ahora un pequeño que llevaba años viviendo en hogares de acogida podrá escribir un nuevo capítulo en sus vidas, gracias al generoso corazón de la familia Mays.
Se trata de Elijah Mays, de 9 años, que en el mes de enero fue oficialmente adoptado por Mandi y Jon Mays de Oklahoma City, Oklahoma.
Este tierno niño había estado en el sistema de cuidado de crianza desde muy pequeño y ya había conocido diferentes hogares temporales, hasta que llegó a la casa de la familia Mays. Al principio la adaptación fue un poco difícil, pero Mandi entendía la situación.
«Cuando estás en tu sexta ubicación desde que tenías dos años y medio, tu [mentalidad] es, ‘No te apegues a estas personas'», dijo Mays.
Antes de Elijah, los Mays ya habían adoptado a un niño de 7 años llamado Judah.
Michael Danielson, el supervisor de planificación de permanencia del Departamento de Servicios Humanos en Oklahoma, quedó especialmente conmovido con este caso y se alegró de haber aprobado la adopción.
«Al principio tenía problemas de comportamiento, pero la estabilidad que le dieron era exactamente lo que necesitaba para recuperarse de todo el trauma por el que había pasado. Eran la familia perfecta para él. Es una de esas raras cosas de ensueño hechas realidad», explicó.
Este pequeño pasó 2.710 días en hogares de acogida, antes de ser oficialmente adoptado. Pero su espera valió la pena cuando sus padres firmaron legalmente sus papeles de adopción.
Elijah se unió no sólo a Mandi y a Jon sino a su hermanito Judah y a los hijos biológicos de la pareja: Harper, de 16 años y Dalton, de 13.
Después del veredicto, familiares y amigos se acercaron a la casa de los Mays para celebrar y felicitarlos por este nuevo comienzo. Hasta Spideman, el superhéroe favorito de Elijah, se acercó a la residencia para saludarlo. Aunque el chico llevaba años viviendo con esta familia, ahora nada ni nadie los podrá separar y esa es una gran felicidad para todos.
En medio de esta pandemia aún suceden cosas buenas y la adopción de este pequeño es una de ellas, comparte esta emotiva historia y envíale a Elijah todo tu amor.