Un error médico puede cambiar la vida de una persona en un instante, solo basta un mal diagnostico para que las consecuencias sean irremediables e incluso mortales y sobre esto quiere advertir Amy Partridge.
Amy es la madre de una niña que perdió sus piernas tras ser enviada por error a su casa.
Cuando tenía sólo 7 años Brogan-Lei Partridge, ahora de 11 años, contrajo meningitis B y fue llevada a emergencias. En ese momento los especialistas la diagnosticaron por error con una simple bacteria estomacal y fue enviada a casa para que guardase reposo.
“Acabábamos de regresar de un paseo familiar cuando contrajo Meningitis B, Brogan-Lei tenía sólo siete años en ese momento. Ella no parecía ser ella misma. Había tenido una noche de insomnio y no paraba de vomitar. La llevamos al hospital pero nos enviaron a casa, diciendo que solo tenía una bacteria en su estómago”, relató Amy Partridge.
Horas más tarde, la madre de 28 años entraría de nuevo a emergencias con su pequeña en brazos casi desmayada. Brogan fue readmitida pero su condición empeoró y entró en estado de coma, en el cual pasó más de una semana.
En ese momento los médicos descubrieron que se trataba de una meningitis y le notificaron a sus padres que debían amputar sus pies para poder salvarla.
Después de esto el asunto terminó de empeorar y Brogan contrajo una septicemia, así que terminaron por amputar también sus dos piernas.
Una situación desgarradora para la familia que se negaba a la idea de que su pequeña tuviese que vivir sin el par de extremidades. En ese momento, Amy desconocía por completo los síntomas de la meningitis y esto ha sido algo que le ha pesado por años.
Por ese motivo, cuatro años después de lo sucedido decidió contar su historia y advertir a otros padres. Brogan, por su parte está decidida a recuperar su vida y su independencia.
“No conocía los síntomas de la meningitis en ese momento. Pero tres horas después de que le dieran el alta médica, regresó al hospital cuando comenzó a tener una erupción. Cuando la volvieron a ver los médicos, confirmamos nuestros peores temores», recordó Amy entre lágrimas.
La meningitis es una infección de las membranas protectoras que rodean el cerebro y la médula espinal. La enfermedad puede ocasionar septicemia, una infección sanguínea potencialmente mortal que provoca daños permanentes en el cerebro o los nervios.
La meningitis afecta a cualquier persona, es más común en bebés, niños pequeños, adolescentes y adultos jóvenes, aunque ya existe una vacuna para prevenirla.
“En las primeras etapas puede confundirse con la gripe, pero puede causar la muerte en menos de 24 horas.
Las consecuencias de la meningitis bacteriana pueden ser devastadoras: uno de cada diez pacientes morirá y muchos más quedarán con alteraciones que cambian la vida, como lesiones cerebrales o amputaciones.
Por eso es tan vital que las personas se vacunen», expresó Rob Dawson, Director de Soporte y Comunicaciones para la Fundación de Investigación de Meningitis.
Esta enfermedad actúa rápido y es difícil de detectar, así que Amy decidió hablar para incentivar a las personas a la prevención de la infección por medio de la vacuna. Ella no desea que nadie más atraviese las dificultades a las que su hija se ha enfrentado.
Ahora Brogan es una chica fuerte y feliz que no se ha dado por vencida ante las adversidades que la vida le ha puesto y tiene una gran misión: informar.
Por favor ayúdanos a compartir el caso de esta chica para que no pase desapercibido. Existen diferentes vacunas que ayudan a prevenir la meningitis, advierte a tus amigos sobre la enfermedad.