Lamentablemente muchos niños están a cargo de padres negligentes, quienes lejos de velar por el bienestar físico y emocional de los seres que trajeron al mundo y de los que son responsables, tienen como prioridad complacer sus caprichos.
En algunos casos las consecuencias para los menores pueden resultar fatales, tal como les ocurrió a estos gemelos en la región rusa de Vilyuchinsk.
Margarita Yanayeva, de 23 años, y su pareja Alexey, de 35, dejaron a sus gemelos de 16 semanas completamente solos y encerrados en su casa mientras se fueron de fiesta durante cuatro días.
La madre de los menores mintió a sus amigos diciéndoles que sus hijos estaban ingresados en el hospital tras ser diagnosticados con coronavirus.
Uno de los bebés murió de hambre y su hermana gemela está ingresada en la unidad de cuidados intensivos luchando por su vida.
“En el transcurso de cuatro días, los niños no recibían ningún tipo de alimento y no se preocuparon por velar por su cuidado”, dijo un agente de la policía.
Los gemelos no recibieron ningún alimento, tampoco garantizaron su higiene y estaban en condiciones peligrosas y deplorables.
Finalmente, la abuela de los niños, preocupada por no poder comunicarse con la familia por teléfono, se acercó a la vivienda a pesar de que su región estaba sometida a confinamiento obligatorio por el coronavirus y la circulación era restringida.
Cuando encontró la devastadora escena llamó de inmediato a la policía.
Los padres de los gemelos se enfrentan a una condena de 20 años de cárcel, acusados del asesinato del bebé fallecido por incumplir sus deberes parentales exponiendo a sus hijos al peligro.
La pareja dejó a los bebés sin ningún adulto cerca que se hiciera cargo de sus necesidades básicas. El niño y la niña eran muy vulnerables a morir de hambre tras la ausencia de sus progenitores.
Cuando la abuela de los gemelos los encontró, fueron trasladados a un hospital en la localidad rusa de Kamchatka. Ella relató que encontró a los gemelos en una condición muy crítica.
El niño murió tras estar en coma y la niña permanece en la UCI. La negligencia de sus padres tuvo un desenlace fatal para el niño, que no logró salvarse después de permanecer cuatro días desatendido. Es desgarrador pensar en el llanto de los pequeños que demandaban atención mientras sentían hambre e incomodidad.
Si la abuela no hubiera actuado a tiempo, la niña también hubiese perdido la vida en las mismas condiciones que su hermano.
Se cree que ella se hará cargo de la menor. El caso ha causado conmoción en su comunidad y esperan que la niña logre ganar la batalla para que puede crecer rodeada del amor y la protección que se merece. Comparte esta noticia.