Ver fotos antiguas siempre nos hace notar los cambios físicos que hemos sufrido y de los cuales, quizás, no nos hemos dado cuenta. Sin embargo, hay quienes realmente cambian por completo su apariencia en sólo una década. De este modo le ha ocurrido a una chica de 24 años quien pasó de un fresco rostro de colegiala a convertirse en «la mujer dragón».
Amber Luke, de la Costa Central de Nueva Gales del Sur, ha mostrado su increíble transformación física, compartiendo algunas fotografías de cómo era cuando tenía 14 años.
Una década después de ser una dulce colegiala, Amber confiesa tener más de cien tatuajes en su cuerpo, incluidos unas singulares mandalas que tiene en sus axilas.
Amber Luke a sus 14 años (izquierda), y en la actualidad.
Pero los tatuajes no son los únicos cambios que la chica ha realizado en su cuerpo. Amber también se dividió la lengua, tiene implantes puntiagudos, globos oculares con tatuajes azules y distintas perforaciones en sus orejas, frente, pecho, labio, mejilla, muñeca y brazos.
Entre tantos cambios, la mujer confiesa que no sólo ha gastado tiempo sino dinero. Esta amante de las perforaciones ha invertido más de 15.000 dólares en su transformación. Sin embargo, confiesa sentirse complacida por la forma en que luce actualmente.
“Odio absolutamente la forma en que solía lucir. No fui yo. Pero a lo largo de los años me he convertido en lo que quiero ser y eso es cómo me veo ahora, aunque al decir eso, debo reconocer que todavía tengo un largo camino por recorrer».
A los 14 años, Amber no estaba conforme consigo misma. A esa edad fue diagnosticada con una depresión clínica severa, la cual la hacía sentirse aún más inconforme. Cuando cumplió 16 años comenzó a desarrollar un gusto por los tatuajes y fue este el primer cambio que realizó en su cuerpo.
“Cuando tenía 14 años, no sabía quién era ni qué quería de la vida. Yo era catatónica y no podía ver qué era lo mejor para mí. Yo era ingenua. Pero ahora tengo una columna vertebral y puedo defender lo que creo. También tengo la confianza de mirar lo que quiera».
Amber se ha apodado ella misma como «Blue Eyes White Dragon», el dragón blanco de ojos azules, siendo este el aspecto que quiere alcanzar con su cuerpo.
Esta chica ha hecho de su imagen una galería andante con los más de 100 tatuajes que exhibe, además confiesa haber notado recientemente el número tan alto de tatuajes que se ha realizado.
Pero realmente los cambios no le causan temor y espera continuar con las modificaciones corporales necesarias para alcanzar totalmente el aspecto que desea.
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