Cuando en el 2014, una mujer de Berlín decidió que era momento de volver a ser madre los médicos alemanes se horrorizaron y pretendieron impedirlo al negarse a llevar a cabo algún proceso de fertilización artificial.
Pues bien, esto no detuvo a Annegret Raunigk de 65 años de edad, quien ya había sido madre.
Esta controvertida noticia que se volvió viral por las redes, desde que oímos de ella, nos lleva a preguntarnos hasta qué punto vale la pena sacrificarse por el milagro de la vida.
Evidentemente, los niños dejaron de serlo y también se convirtieron en madres y padres, regalándole a esta maestra jubilada la posibilidad de ser abuela. ¡Y no de un solo niño, sino de 7!
Tal parece que para Annegret esto no es suficiente. La mujer demostró ser devota de las familias numerosas y decidió que contaba con el suficiente amor y la atención para poder cuidar de algunos niños más.
Esto fue incentivado principalmente por su hija más pequeña. La niña que tan solo contaba con 10 años cuando esta noticia se volvió viral en el 2015, fue protagonista de su propio escándalo en el 2005 en Alemania.
Ya entonces, cuando esta niña tan adorable apenas si era concebida, el escándalo también sacudió a Berlín, pues muchos consideraban que era irresponsable por parte de Annegret Raunigk el llevar a cabo un embarazo a los 55 años de edad.
Para quienes se opusieron, ahora tendrían aún más de qué hablar. La mujer convencida de que aún podía ser madre, decidió con sus 65 años de edad someterse a un proceso de fertilización in vitro.
Los especialistas en el asunto y demás médicos alemanes no estaban de acuerdo con la mujer y se negaron rotundamente a llevar adelante ese proceso, considerando que no estaba en condiciones para que su cuerpo y su salud lo soportaran.
Pero nada iba a impedirle cumplir su sueño y brindarle a su hija más pequeña la posibilidad de ser una hermana mayor. Es entonces cuando Annegret Raunigk decidió viajar a Ucrania, donde le realizarían el proceso correspondiente y finalmente quedaría embarazada.
Los cuatrillizos nacieron en el 2015 contando con 26 semanas de desarrollo. Si bien el parto no tuvo demasiadas complicaciones, sí que las hubo después del nacimiento de los niños. Pero por suerte para todos, todo resultó bien.
En ese entonces el mayor de los hermanos contaba con 46 años de edad y el número de hermanos había ascendido a 17. Han pasado casi cuatro años del nacimiento de los hermosos bebés y la familia continúa unida y feliz, demostrando que no hay nada que no pueda lograrse por el amor a la familia.
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