Becky Crandley es una amorosa madre de cinco chicos que da lo mejor de sí por su familia. Como mamá, sabe que la adolescencia puede resultar una etapa muy difícil y los jóvenes pasan por una serie de cambios en su comportamiento.
Durante los últimos meses, Becky comenzó a preocuparse por uno de sus hijos. Su teléfono no paraba de sonar con quejas de los profesores y todo indicaba que su hijo estaba siendo sumamente irrespetuoso.
“Sé que está pasando por una serie de cambios pero el irrespeto es algo que no podemos tolerar bajo ninguna circunstancia”.
Al principio, Becky decidió tomarlo con calma. Pensó que se trataría de una simple etapa pero luego comprendió que el comportamiento de su hijo estaba llegando demasiado lejos.
Después de un par de reuniones con la directiva de The Sittingbourne Community College, Becky supo que su hijo estaba discutiendo exclusivamente con sus profesores. Quedó verdaderamente indignada y contactó a la encargada de la clase de Matemáticas para tomar acciones al respecto.
“No quiero que mis hijos den tratos injustos a ninguna mujer”.
Becky decidió tomar acciones para demostrar que ese tipo de comportamiento era inaceptable. La maestra de matemáticas estuvo de acuerdo en que Becky tomara un asiento en el salón de clases y horas después, el joven quedó en completo en shock.
“No tenía idea de que iría a su escuela y cuando entré al salón me presentaron como su mamá”.
En efecto, el hijo de Becky llevaba un día lleno de respuestas inadecuadas a sus profesoras. Cuando vio que su mamá llegó al salón de clases no podía creerlo y su cara se puso roja. Becky se mantuvo allí durante horas y se aseguró de que el joven no olvidará jamás una lección tan importante.
El joven está estudiando el octavo grado.
Desde entonces, su comportamiento ha mejorado notablemente y Becky decidió dar a conocer su historia para que los padres de todo el mundo comprendieran la importancia de apoyar a los profesores.
“Tenemos que tomar acciones en cuanto al comportamiento de nuestros hijos. Los jóvenes parecen empeorar cada día más”.
No hay duda de que Becky sabe cómo tomar cartas en el asunto a la hora de dar lecciones inolvidables a sus hijos. Esperamos que este joven y sus compañeros se dirijan ahora con mucho más respeto a sus profesoras.
Seguro que el adolescente siempre se acordará de la presencia de su madre aquel día de clases. Comparte la reacción de esta mujer que se ha ganado la admiración de muchos.