Yo jamás aprendí a doblar las «sábanas de caja» (así les llamaba mi abuelita a las sábanas bajeras, que tienen un par de elásticos en las esquinas para adaptarse), así que simplemente has hacía una bolita y las guardaba en el fondo del armario a la espera de ser usadas y sus arrugas fueran cubiertas por las demás sábanas y mantas, escondiéndolas. ¡Pero no más! Mis pobres sábanas dejarán de sufrir la marginación de mis descuidos gracias a este increíble y sencillo truco, ¡Incluso yo puedo hacerlo! Y si eso es cierto, queridos amigos, cualquiera puede.
Aquí tienes el video subtitulado en español del canal de YouTube Living On A Dime. Te recomendamos visitarlo para conocer todos sus trucos.
Es universalmente conocido que las arrugas producto de los dobleces ordenados no cuentan… Y desde ahora mis pobres sábanas tendrán sólo arrugas de esas 🙂
Comparte este maravilloso truco con ese amigo que no es precisamente «la reina del hogar»… ¡Estamos juntos en esto! 😉