Los quistes ováricos son un problema bastante común entre las mujeres. Quizás por esta razón, muchas veces no se le presta la debida atención que exigen estos casos.
Pero a veces, obviar el problema puede tener consecuencias fatales. Este es el caso de una madre de Tennesse, quien con apenas 32 años había pasado los últimos cinco años conviviendo con un quiste que se había adueñado de su cotidianidad.
La rutina de Ashley Walden cambió por completo debido a la presencia de un quiste ovárico que fue diagnosticado como benigno pero que creció a tal nivel que se convirtió en algo bastante doloroso para esta madre.
Su día a día se vio afectado, pues tenía inconveniente hasta para caminar. Especialmente en los últimos 2 años en los que vio que su abdomen crecía aceleradamente.
«Hace dos años que no podía disfrutar del tiempo con mis hijos. Quiero volver a estar sana para compartir al cien por ciento con ellos», dijo Walden.
En el momento que a la Sra. Walden le diagnosticaron el quiste su médico parece no haberle dado mucha importancia al caso y la mujer tampoco hizo mayor énfasis en una intervención por temor. Sin embargo, esto se hizo bastante doloroso y en ocasiones la mujer creyó tener algo más debido al tamaño de su abdomen.
«Tomé un par de pruebas de embarazo. Salieron negativas. Finalmente, terminé en la sala de emergencias porque estaba sufriendo mucho. Fue cuando descubrieron que el quiste golpeó un brote de crecimiento», dijo la Sra. Walden.
La mujer canceló un par de veces su intervención quirúrgica, a pesar de que los médicos le insistieron en la gravedad de su caso. Alshley Walden fue finalmente intervenida y se le extrajo un quiste de poco más de 9 kilos, lo que equivale al peso de dos neonatos.
«Un buen ginecólogo siempre escuchará sus inquietudes, hará un examen y realizará las pruebas necesarias», dijo el Dr. Dowell, respecto al caso de Ashley Walden.
Ahora, esta madre de dos hijos se recupera de la intervención y quiere educar e instar mediante su caso a otras mujeres, para que de este modo puedan buscar ayuda médica a tiempo y no posterguen la posible intervención.
La Sra. Walden ha entendido que no vale la pena ponerle excusas a tu salud y que lo mejor es atacar los problemas cuanto antes, fue mucho el dolor que esta mujer se pudo haber evitado. Sin embargo, la buena noticia es que ahora podrá volver a su vida normal.
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