Meghan Gilbert era una estudiante obesa que sufría todos los días el acoso de sus compañeros en el colegio, que la llamaban con los peores apodos, todos referidos a sus piernas y cuerpo. Pero ahora, Meghan es otra persona.
A base de una dieta equilibrada y ejercicio, la joven pudo superar su problema de desorden alimentario y comenzó a perder kilos cuando a los 21 años vio una foto en donde se veía muy triste.
Meghan, antes de perder peso.
Ahora Meghan ama sus piernas y su cuerpo, y a través de su cuenta de Instagram, @megsmotivationn, muestra cuán orgullosa está de su imagen.
La joven es originaria de Dallas, Texas, y llegó a pesar 90 kilos cuando tenía 15 años y atravesaba una crisis que la había llevado a desarrollar un desorden alimentario, el que estaba fuera de control.
Meghan en el gimnasio, donde concurre todos los días.
Pero no sólo sube fotos haciendo ejercicios.
Su vida cambió de forma radical junto con su cuerpo.
Sus compañeros, crueles, le decían de todas formas, siempre burlándose de sus piernas, de su cuerpo cada vez que ingresaba a la clase.
Pero el punto de inflexión de Megan fue cuando vio lo infeliz que se veía en las fotos del colegio, y decidió encarar un gran cambio.
Modificó su dieta y comenzó a realizar una rutina de ejercicios, que la llevaron a perder nada más que 28 kilos, y ahora luce orgullosa su espectacular figura de 62 kilos.
Las piernas de Meghan, su mayor orgullo.
Ahora nadie se burla de su físico.
Pero no por eso Meghan deja de ejercitarse en el gimnasio.
“Veo mis piernas como mi punto fuerte, antes nunca hubiera usado pantalones cortos o mostrado mis piernas, pero ahora amo lo musculosas que son” cuenta Meghan feliz.
Ahora si alguien le dice algo sobre sus piernas, siempre es positivo.
Meghan, ahora es modelo y una celebridad en las redes sociales, pero de niña desarrolló sobrepeso debido a ciertas situaciones de su vida. Fue diagnosticada con ansiedad y depresión, que la llevó a sufrir de bullying. Llegó a un punto en que no salía de su casa y se encerraba a comer “porque no me importaba” cuenta.
Al principio de su dieta, no fue nada fácil. “Al principio fue muy duro, pero sabía que tenía que esforzarme y generar una pasión hacia el ejercicio. Y creo que los problemas te ayudan a crecer”.
Hacer frente a sus problemas fue muy difícil.
Pero la joven siempre tuvo en mente que bajar de peso era lo mejor para su vida.
Lo más importante era su salud física y emocional
Hoy ya no tiene fotos en donde salga triste 🙂
“Aprendí a comer los alimentos correctos y en las porciones correctas, empecé un riguroso entrenamiento y comencé a amar el ejercicio”.
Y todo lo cuenta a través de su cuenta en Instagram.
“La forma de mi cuerpo cambió completamente, mi cara antes era un círculo, mi cuello y mi cuerpo es completamente diferente, me veo como una nueva persona”, relata feliz Meghan.
La joven es un ejemplo de perseverancia, de amor y de superación. ¡Compártela!