A través de lo siglos XX y XXI, la idea de «el cuerpo perfecto» para las mujeres ha cambiado tanto como las modas de vestir. En algunos casos, el contraste entre décadas es impresionante y habla sobre las actitudes del público de la época, que básicamente se debate entre si las mujeres deben tener curvas o no. Dietas, pastillas y celebridades han pasado… y nosotros seguimos animando a las mujeres y niñas a compararse constantemente con otras mujeres y con «cuerpos perfectos». Da una vuelta con nosotros por los últimos 100 años de «cuerpos ideales» y ríete un poco de nuestras modas.
Chica Gibson (1910)
Inspiradas en las ilustraciones de Chales Dana Gibson, las chicas a principios del siglo XX aspiraban a lucir una figura curvilínea. Con ayuda de corsés, las mujeres lograban una diminuta cintura y un porte elegante que quitaba el aliento (literalmente se quedaban sin aliento. Camille Clifford es el ícono de la belleza de esta época.
Las Flapper (1920)
Después de una época de mucho recato y limitaciones sociales para las mujeres, las «flapper» fueron mujeres rebeldes que se negaban a usar corsé, vestían faldas cortas y disimulaban sus curvas bajo ropas holgadas, mientras bailaban al ritmo del jazz, un género de música rebelde.
Con el cabello corto, osaban conducir autos a velocidades altas y beber licores fuertes, para la preocupación de las generaciones anteriores. Actrices del cine mudo como Alice Joyce, con mucho maquillaje y en el mundo del espectáculo, eran al mismo tiempo, amadas por las masas y consideradas indecentes.
La Sirena sensual (1930)
Las curvas volvieron a estar de moda y las mujeres con curvas generosas y muslos redondeados y suaves eran consideradas especialmente sexys. La actriz Jean Harlow es el símbolo sexual de la época y, con su personaje de mujer fatal en la película «Blonde Bombshell», le robó el corazón a más de uno.
Independientes pero delicadas (1940)
Durante el período de la guerra y la posguerra, las mujeres se hicieron cargo de tareas en fábricas, campos y oficinas que antes eran desempeñadas exclusivamente por hombres. La moda ropa se usaba modesta, destacando la cintura. La figura esbelta pero saludable era apreciada, pues la comida no era abundante. Un referente de belleza es Rita Hayworth, bailarina y actriz que alcanzó gran fama durante esta década.
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Curvas deliciosas (1950)
Las mujeres compraban pastillas con multivitamínicos para subir de peso, grandes senos y muslos llenos eran deseables. Marilyn Monroe, considerada la mujer más bella de la época, sería una modelo de tallas extras en nuestros días.
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Cuerpo de puberta (1960)
En los sesentas,junto a la introducción de las minifaldas, una figura extremadamente delgada era vista como lo máximo. Pechos pequeños, muslos delgados y nalgas planas eran deseables, la supermodelo Twiggy es la representante del cuerpo ideal para esta época.
La reina del baile (1970)
Hombros y pechos más anchos, y cinturas delgadas eran el ideal. Las caderas se preferían más bien estrechas, acompañadas de piernas largas. Comenzó la moda de broncearse, muchas veces las mujeres se tendían al sol durante horas con aceite de coco hasta quedar bastante morenas, el ejemplo perfecto es la famosa Farrah Fawcett .
Supermodelos (1980)
Un cuerpo alto, atlético, con piernas torneadas y una cintura diminuta eran lo ideal. Siguió la moda del bronceado, de una manera un poco más natural, y el cabello lleno de volúmen. El corte alto en bodies, trjes de baño y ropa interior acentuaba el largo de las piernas y fuertes, pero delgadas. Elle MacPhersones fue conocida como «el cuerpo».
Huesitos chic (1990)
Un look con pocas curvas, tanto en el cabello como en el cuerpo, contrasta con la década anterior. Delgadez casi hasta los huesos paseaba en las pasarelas, donde lucir caderas estrechas, pechos pequeños, piernas largas y delgadas de manera andrógina era aplaudido. Modelos como Kate Moss popularizaron el look de «Heroína chic», por asemejarse al aspecto que usuarios de la droga adquirían con el tiempo.
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Flaca pero saludable (2000)
Durante la siguiente década, las mujeres seguían buscando una apariencia delgada, pero sin caer en el extremo. Vientres planos y tonificados, bronceados artificiales y mechones de cabellos de colores dominaban las revistas de moda. Christina Aguilera y Britney Spears representan claramente el ideal de esta época.
Traseros generosos (2010)
La tendencia de apreciar los glúteos más que nunca nos tomó un poco por sorpresa. Las celebridades son sus propios paparazzi gracias a las redes sociales, donde se aprecian las medidas generosas en casi todo el cuerpo: Senos grandes, muslos generosos y torneados, traseros enormes, labios voluptuosos, cejas definidas y abundandes… pero vientres planos, por lo que recurrir a la cirugía estética para lograrlo es muy común y pocas veces aceptado públicamente.
Si Darwin viviera… ¿seguiría sosteniendo su teoría de la evolución? Muchas de éstas modas nos recuerdan lo rápido que los seres humanos podemos cambiar de opinión, así como la subjetividad en la percepción de la belleza. Por eso es importate amar nuestro cuerpo, al fin que tarde o temprano estará de moda.
Comparte un poquito de historia con tus amigas para recordarles que las modas pasan rápidamente pero no la salud.