Hoy en día, las mujeres se encuentran en las mismas profesiones, posiciones y trabajos que los hombres. Pero desgraciadamente, no siempre reciben el mismo respeto ni ganan el mismo salario que los hombres.
Incluso las féminas han logrado conquistar lugares que en el pasado eran inimaginables y también a sectores que se siguen relacionando exclusivamente con los hombres, por ejemplo: el deporte.
Esta vez, la periodista y reportera deportiva llamada Bruna Dealtry, se encontraba transmitiendo la celebración de un grupo de fanáticos al finalizar un partido de fútbol el pasado 14 de marzo en Brasil, cuando de repente uno de los presentes que celebraba al equipo Vasco de Gama, la besó en la boca sin su consentimiento.
Esta situación provocó la molestia de la periodista y compartió el segmento del indeseado acto en su perfil de Facebook, denunciando el hecho y alegando que las mujeres merecen ser respetadas como profesionales y que le permitan hacer su trabajo como sí lo hacen con sus colegas masculinos.
La publicación rápidamente alcanzó más de 1.5 millones de reproducciones y generó la creación de una campaña en las redes sociales de Brasil con la etiqueta #deixaelatrabalhar, que significa “déjala trabajar”, en español.
Por motivo de la campaña, otras profesionales del periodismo deportivo se colocaron una camiseta negra y contaron sus propias experiencias de abusos y desprestigios que han vivido en sus funciones como periodista en exteriores.
Una de las más significativas, es el caso de la reportera, Renata de Medeiros, que se encontraba en un estadio y al entrevistar a un aficionado, este la insulta, cuándo ella le pida que repita lo que le dijo en cámara, este la ataca.
Junto el vídeo, Bruna escribió un relato donde dejó ver su tristeza, indignación y sobre todo preocupación ante la situación de las mujeres profesionales en la industria deportiva, cómo el resto de las mujeres que deben toparse con esta conducta en sus diferentes puestos y posiciones alrededor del mundo.
Siempre fui una reportera que le encanta una fiesta de hinchas. No me importa que haya baño de cerveza, hinchas saltando y pisándome el pie… Siempre me dejo llevar por la emoción y trato de sentir el momento para hacer mi trabajo de la mejor manera posible. Pero hoy, sentí en la piel la sensación de impotencia que muchas mujeres sienten en estadios, metro, o incluso caminando por las calles. Un beso en la boca, sin mi permiso, mientras yo ejercía mi profesión, que me dejó sin saber cómo actuar y sin entender cómo alguien puede sentirse en el derecho de actuar así”, escribe la reportera.
Puedes ver a continuación el vídeo del abuso a Bruna: